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Rafa Nadal y Xisca Perelló ya son marido y mujer. La pareja ha diseñado una boda blindada en Sa Fortalesa, un complejo prácticamente inaccesible que se asoma a la bahía de Pollença. El enlace religioso estaba previsto a las 12:00 horas aunque, finalmente, ... se ha celebrado con una hora de retraso. Esta misa ha sido oficiada por el sacerdote Tomeu Català, presidente de Proyecto Hombre de Baleares y gran amigo de la reina doña Sofía quien, por cierto, ha estado presente en el enlace junto a su esposo, el rey don Juan Carlos. Aunque no habido una iglesia de por medio, la joven pareja ha obtenido el beneplácito del obispo de Mallorca, Sebastià Taltavull, para celebrarla al aire libre.
Tal y como estaba previsto, Ana María Parera, la madre del novio, y Bernat Perelló, el padre de la novia, han sido los padrinos y los encargados de llevar del brazo a los novios camino del altar, ante la mirada ilusionada de Sebastián Nadal y de María Pascual, el padre y la madre de Rafa y Mery, respectivamente. Tanto los recién casados como los familiares más cercanos se alojan desde ayer en la misma fortaleza. De hecho, sobre las 22.00 horas del viernes, mientras tenía lugar la cena de bienvenida previa a la boda, fue el propio Rafa quien compartió en su cuenta de Instagram una imagen de las espectaculares vistas que tenía desde este antiguo bastión militar.
Poco después de las 10:00 horas de hoy, los autobuses se acercaban a la zona de Son Brull, Illa D´Or y Formentor para recoger a los invitados. Concretamente, en el hotel Illa D´or, situado en el puerto de Pollensa, se han bloqueado 43 habitaciones donde se alojan algunos de los rostros más conocidos y cercanos a la pareja, como los tenistas Marc López, el capitán de la Copa Davis, Albert Costa, Carlos Costa o el médico deportivo Ángel Ruiz Cotorro
Feliciano López llegó el viernes al hotel con semblante serio debido a los medios gráficos que se agolpaban en la puerta del hotel Illa D`Or, y eso que su íntimo amigo Marc López había ido a recogerle al aeropuerto en el impresionante Aston Martin que le había prestado Rafa Nadal. Su mujer, Sandra Gago, cogía un avión a las 6:00 horas de esta misma mañana rumbo a Mallorca. La anécdota del día es que se ha olvidado de pagar al taxista a su llegada al hotel, donde tenía previsto reunirse con su marido y prepararse para la boda. Un dato que se ha quedado en una simple anécdota cuando la madrileña se ha percatado de su despiste.
Sin embargo, han sido los reyes eméritos, don Juan Carlos y doña Sofía, los que más expectación han levantado, ya que su asistencia ha sido una incógnita hasta última hora. Con el paso de los años y gracias a los triunfos de Rafa Nadal, los Reyes han labrado una amistad especial con el tenista, quien les habría invitado personalmente a su enlace. Ellos han sido de los pocos invitados en entrar al recinto en un coche con los cristales tintados, a través del Aeródromo militar custodiado por las Fuerzas del Aire. Sin embargo, hemos podido ver a don Juan Carlos de copiloto, que ha saludado amablemente a la prensa que se encontraba en las inmediaciones. También Carlos Moyá, gran amigo del tenista, y su mujer Carolina Cerezuela, que ha viajado a Mallorca desde San Sebastián por asuntos laborales, han accedido a este inaccesible emplazamiento en su propio coche.
Aunque el día amenazaba lluvia, finalmente ha dado un respiro a la isla de Mallorca con un cielo claro y temperaturas no demasiado calurosas. En estos momentos, la pareja y sus 350 invitados disfrutan del banquete que corre a cargo de la chef mallorquina Maca de Castro. Por el momento, seguiremos esperando una imagen oficial de los recién casados.
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