Unos Arquillos de fantasía

Beneficiados por un escenario de Primera, la verdad es que esta versión comprimida de la Pasarela Gasteiz On supo a poco. También evidenció que el talento de Marcos Villafruela desborda. Entre los acordes de 'Caruso', sus bordados, los detalles cuidados al milímetro y hasta los pamelones 'kingsize' acapararon los mayores aplausos. La cantante Ana Guerra ya ha lucido en público alguna de sus piezas únicas.

Aunque arrancó con una pizca de retraso sobre el horario previsto -por la calle Mateo Moraza avanzaron dos manifestaciones distintas en el espacio de diez minutos-, valió la pena. La novel Amaia Sánchez convenció con prendas que combinaban tejidos habituales con plástico. Atención a su vestido crudo con volantes en la parte inferior y rejilla en la cabeza.

Nuna apostó por la reutilización de materiales, incluso para un vestido de novia. Carla Ramacciotti trajó la fantasía a este emblema de la capital alavesa. E Iñigo Cordón el futurismo, con algunas apuestas de lo más espectaculares.

Los juegos de luces terminaron de cerrar el círculo. Hasta algún vecino de tan coqueto enclave siguió las idas y venidas de los modelos desde su ventana, móvil en ristre. El run rún de los vitorianos de terraceo se colaba pese a la música de cada desfile. En realidad, otro punto favorable más para un marco tan especial, como meses atrás lo fuera el kiosko de La Florida.

¿Y qué decir de los trece comercios locales? Modelo de supervivencia en estos tiempos de penuria. Zapatería Wow, Ciclos sport, Elaia, Moda María Jesús, Cotton Artean, Barbour, Galerías Xara, Ríos Moda, Atelier Vitoria, Novias por siempre jamás, Baskonia Alavés Experience Store, Calzados Pasos y TwinSisters. Desde diversos barrios de la ciudad, sus propietarios recordaron que en sus estanterías guardan tesoros. Para ellos y para ellas. Con o sin pandemia.