El PSE y LAB rechazan al nuevo director de ETB por su relación con una productora privada

La condición de Barinaga como fundador y propietario de la empresa de producción audiovisual Belauko ha despertado sospechas tanto en el PSE como entre los representantes de la central sindical en la cadena pública. Los primeros advierten del riesgo de que con Barinaga se produzca «el efecto puerta giratoria», que de forma coloquial designa los trasvases de altos cargos entre las esferas pública y privada, generalmente en beneficio del interés particular y en perjuicio del general.

Para Idoia Mendia, Alma Fernández y Mikel Unzalu, representantes socialistas en el consejo de administración el ente, «a este señor sólo se le reconoce como trayectoria profesional ser propietario de una empresa privada cuyo casi único cliente es ETB». Por ello, tras pedir a Barinaga como exigencia ética que se abstenga de participar en cualquier adjudicación, anunciaron «un seguimiento de todos los contratos que realice», amparados en la ley de incompatibilidades aprobada por unanimidad por el Parlamento vasco hace precisamente tres semanas.

LAB, por su parte, cree que con la elección de Barinaga se apuesta por una «privatización de las empresas públicas». El sindicato acusa al bilbaíno de haber recibido dinero de la televisión vasca para la productora en la que trabaja. Mediante un comunicado, añade que el nuevo director de ETB «ya trabaja» para la casa. Asimismo, señala que en su empresa los empleados «saben muy bien lo que es trabajar en malas condiciones y, en muchos casos, tener problemas para cobrar sueldos acordados o menos de lo que se les debe». Por ello, LAB ha pedido a Iturbe que aclare qué modelo de televisión desea y apunta que «estaría bien saber de una vez» cuánto dinero han recibido las empresas de Barinaga por parte del ente público vasco.

Problemas con la OPE

En la reunión de ayer en Pamplona el PSE también se interesó por la situación de la convocatoria de empleo público para cubrir 49 plazas en las radios del grupo. Los socialistas reclamaron a Iturbe información sobre la sentencia que el lunes obligó a suspender una de las pruebas.

La directora anunció con una nota que el examen retrasado se desarrollará a mediados de septiembre, sin que «ello suponga un retraso significativo en el proceso». Inicialmente, su celebración estaba prevista para este mes, a continuación de la segunda prueba, que tendrá lugar el sábado. Sin embargo, tras el recurso de un grupo de aspirantes que pedía medidas cautelares, un juzgado bilbaíno detectó falta de garantías y mandó que el tercer ejercicio no tenga lugar antes de que fueran corregidos y publicados los resultados de la parte anterior del concurso.