Nuevo récord Guinness con 'label' alavés: la fila de naipes más larga del mundo

Una nueva marca mundial, con 'label alavés', figura en la 'biblia' de las hazañas humanas, Sí, hablamos del 'Libro Guinness de los Récords'; la publicación que nació en 1955 como un árbitro neutral para dirimir los debates de los británicos en los pubs. Y se le ocurrió a Sir Hugh Beaver, director de la marca de cerveza Guinness, mientras cazaba chorlitos. Él tenía la duda de si aquellas aves eran las más rápidas de Europa. Y nadie le pudo o supo responder hasta que vio la luz el primer ejemplar. Desde entonces han sido varios los alaveses que han compartido esa gloria del Olimpo de los récords humanos. Y otras muchas marcas registradas, con vínculos con el territorio, figuran también en sus páginas. Ahora se acaba de añadir una nueva: la fila de naipes más larga del mundo; que lleva firma alavesa.

Ésta tiene una longitud de 1.158,91 metros está formada por un total de 14.795 cartas -nada menos que 288 barajas- todas ellas superpuestas una a una. Así han quedado registrados, de forma oficial, estos datos en el nuevo Récord Guinness logrado por David Cabrero, Nicolás Landa, Jaime Hernández de Ossó, Adrián Aurensanz y Alberto Carcasona. Cinco amigos de Huesca que llevaban ideando este reto desde hace más de tres años, y que hace apenas unos meses lograron materializar.

Esta proeza lleva también sello alavés, ya que todas y cada una de las barajas que fueron empleadas para lograr la hazaña pertenecen a la marca Naipes Heraclio Fournier, la histórica empresa de fundada en Vitoria hace más de 150 años, y hoy en día consolidada como líder mundial en la industria del naipe.

El reto, explican desde la compañía, se prolongó durante unas tres horas, «a contrarreloj, corriendo sin parar para abrir cada estuche y colocarlo en el suelo para después realizar el conteo y medir la longitud de la línea con el arquitecto en aproximadamente una hora», detallan. Todo ocurrió el 10 de septiembre de 2022 en el pabellón municipal de Huesca. Sin embargo, la marca no ha sido certificada hasta hace unas cuantas semanas.

David, uno de los jóvenes que ha liderado el proyecto para lograr este nuevo récord, relata los detalles del proceso. «Una vez haces la solicitud, Guinness tarda entre tres y cuatro meses en darte el visto bueno para realizar el intento oficial. Después de realizarlo, hay que recoger las interminables evidencias para que puedan asegurarse de la veracidad del intento. Una vez llegan las evidencias tardan entre tres y cinco meses en verificar y enviarse el certificado», señala el joven oscense, que rememora cómo los naipes han estado muy presentes en su vida desde su infancia. «Todos nos hemos criado jugando a las cartas. En mi caso, conozco a Fournier porque mis abuelos han sido grandes jugadores de guiñote y era muy común ver sus barajas por todas partes, además, que la empresa de naipes más importante sea española es un orgullo para todos«, apostilla.

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