Magialdia

Vitoria tiene truco. La ciudad ya es «un referente de la magia mundial». Lo dice José Ángel Suárez, al frente del festival decano dedicado a esta disciplina en España: Magialdia. Un pionero ciclo organizado por la Asociación de Ilusionistas que componen 11 miembros y otros tantos voluntarios. La convocatoria llena cada año no solo la capital, también diversas localidades del territorio alavés de artistas de un amplio espectro con espectáculos variados e inéditos. Magia de cerca, de escena, para escolares, para familias, en euskera, a través de rutas... Son algunos de los formatos que superan la tradicional chistera. En el pórtico de la Catedral Santa María, en talleres, en palacios del Casco Medieval, en el Anillo Verde, con actuaciones en pueblos de la provincia...

Los pases se suceden en escenarios de todo tipo con figuras que asombran a un público diverso y también contribuyen al desarrollo económico y turístico de Vitoria y Álava. Tan sólo en la última entrega del festival desembarcaron en la ciudad 465 profesionales y congresistas, tanto del resto de la geografía nacional como de países como Francia, Italia, Portugal, Suiza, Irlanda, México, Chile, Argentina o China, entre otros. Edición tras edición, este periódico contribuye a la programación al difundirla y ofrecer espectáculos en exclusiva para suscriptores.

Esta importante trayectoria refuerza los propósitos a futuro del gran foro que reúne a prestidigitadores de toda condición. Magialdia, que alcanzará en 2025 su trigésima sexta edición, «pretende traer a Vitoria los mejores espectáculos de magia del momento, a profesionales de todo el mundo y ser referencia mundial de la magia», subraya Suárez. No en vano, destaca que se trata de «un evento de ciudad que implica a muchos sectores del entramado local». El festival constituye «una cita ineludible y esperada» dentro de la agenda cultural de la capital. Es más, «aporta una programación única que no es posible disfrutar en ningún otro sitio». Un cartel que se extiende a lo largo de tres semanas, incluido el ciclo Magialdiaraba que recorre el territorio, «lo hacen único y, sobre todo, pone a Vitoria en el panorama mundial de la magia, siendo una referencia para todos los aficionados y profesionales», remarca el director del festival.

Varios datos respaldan estas conclusiones. Por ejemplo, que «un 15% de los magos asistentes al programa para profesionales son extranjeros». Magialdia llega a un público de «20.000 espectadores cada año». Y a futuro su objetivo es «crecer, con nuevas ideas, nuevos espectáculos y una programación a la altura de lo que se espera del festival».

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