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EFE
Jueves, 14 de mayo 2015, 20:32
La candidata a diputada general de Álava por el PSE-EE, Cristina González, ha asegurado este jueves que "cada euro" destinado a los servicios sociales "revierte a la Administración" y por tanto representa "una inversión", aunque "el PP piensa que es un gasto". González ha atendido a los medios de comunicación, junto con el candidato socialista a alcalde de Vitoria, Peio López de Munain, antes de mantener un encuentro con diversos colectivos sociales.
La también secretaria general del PSE de Álava ha defendido que los servicios sociales que prestan las instituciones deben servir no sólo para "dar dignidad a las personas que lo necesitan", sino que también son "una fuente de generación de empleo y reactivación económica". Por ello, ha criticado que en los últimos años la Diputación Foral de Álava, gobernada por el PP, haya "quitado" servicios a pesar del "juego que ha hecho con los porcentajes de gasto" para aparentar mayores inversiones.
En su opinión, el PP se ha mostrado "profundamente insensible a los problemas sociales" y no ha mostrado "ninguna empatía" ni con los usuarios del servicio ni con el personal que los atiende. Ha denunciado en este sentido que las valoraciones de las peticiones de dependencia se demoran en el tiempo y son "restrictivas" y también que se han reducido las horas del Servicio de Atención de Domicilio (SAD) y el número de plazas en las residencias de mayores.
"Recuperar las políticas perdidas"
González ha propuesto diversas medidas para "recuperar las políticas perdidas", atender las necesidades de los alaveses y fomentar la creación de empleo y ha apuntado que para ponerlas en marcha se puede recurrir al remanente de 9 millones de euros con el que, según ha dicho, cuenta la Diputación de Álava. La dirigente socialista ha abogado por potenciar la figura del asistente personal que "atienda (al beneficiario) en todas las necesidades de su vida diaria" y por aumentar el número de horas del SAD, actividad en la que se han perdido 400 empleos en los últimos años.
Ha defendido además que se mejoren las condiciones laborales de los trabajadores del Instituto de Bienestar Social y "acabar con la interinidad" de muchos de ellos, y que se simplifiquen los trámites para pedir ayudas. Como ejemplo de la complejidad de estas solicitudes ha explicado que es necesario rellenar 14 formularios para pedir un audífono. González ha ensalzado la labor desarrollada por el tejido asociativo porque "cumple una función vital al llegar donde no lo hacen las instituciones" y ha apostado por dotarlo de estabilidad presupuestaria, lo que contribuirá a que cree empleo.
Por su parte, Peio López de Munain ha considerado que durante esta legislatura el Ayuntamiento de Vitoria , dirigido por el popular Javier Maroto, ha demostrado tener "un corazón de piedra y ser poco sensible" con los colectivos sociales, tanto en el ámbito de la cooperación internacional como en el sector sanitario.
El aspirante socialista, que ha denunciado que el PP les ha retirado "casi el 100 %" de las subvenciones municipales, ha abogado por que estas agrupaciones reciban el reconocimiento que merecen a través de una financiación adecuada.
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