

Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
Venancio Ogueta recibe a EL CORREO con la mesa de su despacho plagada de documentos. Preside los montones de papeles la presentación de la zona ... de bajas emisiones que usó el Ayuntamiento de Vitoria para darla a conocer a los medios. El Real Automóvil Club Vasco Navarro (RACVN) aún no ha decidido si recurrirá o no la ordenanza municipal, pero su responsable territorial no tiene dudas de qué futuro le espera al vehículo privado: «La zona de bajas emisiones es un primer paso. El siguiente será excluir a todos los coches de las ciudades».
– Esta semana Vitoria ha dado luz verde a la polémica zona de bajas emisiones. Días después de la presentación, ya en frío, ¿qué análisis hace de la medida?
– Es una discriminación. La gente con mayor poder adquisitivo podrá adaptarse a las exigencias, podrá comprar un coche. Las zonas menos pudientes tendrán que asumir una parte del tráfico porque no se va a poder circular por las zonas céntricas. Nosotros creemos que la ciudad es para todos: para el que quiere ir andando, en bici, en patín y en coche. Que cada uno decida su forma de movilidad.
Noticia relacionada
– ¿Teme por el impacto en el comercio del centro?
– Vas a limitar la zona centro a quien quiera comprar un souvenir, porque nadie quiere ir cargado ni de peso ni de volumen. Para eso me iré a un centro comercial, aparcaré en el parking, meteré las cosas en el maletero y a casa. Al final, se trata de que todos estemos a gusto en nuestra ciudad. La inmediatez está reñida con la sostenibilidad.
– Explíquese.
– Llevamos muchísimos años adaptando las ciudades al coche y ahora, en nada de tiempo, queremos sacarlo. La zona de bajas emisiones (ZBE) será el primer paso para sacar al automóvil de la ciudad. Ahora se apretará con los menos contaminantes, pero luego serán los coches en general, todos. Si nuestra calidad del aire no es mala, podemos tener un plan previsto para cuando lo sea y aplicarlo entonces. Si no es mala, pues no tendremos que hacer nada. Tendremos el plan y ya está.
– ¿Van a recurrir la ordenanza ante los tribunales como han hecho con las zonas de Bilbao y San Sebastián?
– Todavía no hemos tomado una decisión. Es cierto que la zona de bajas emisiones de Vitoria es la menos mala, es la más benévola según los datos que tenemos. La segunda fase es más amplia, está dentro de lo que se había previsto en un principio... Se está valorando. No tenemos muy claro que vayamos a recurrirla.
– O sea, que puede que opten por no presentar recurso.
– Puede ser que esta no se recurra.
– El acuerdo con EH Bildu contempla blindar el centro para los residentes dentro de un año. ¿Qué opina?
– Creo que va a ser mucho más complicado circular. Los coches se van haciendo viejos. Las limitaciones que van a tener las personas con menos poder adquisitivo se van a quedar fuera de las opciones.
– Pero las personas con rentas bajas van a estar exentas.
– Sí, hay exenciones, pero es que siempre estamos con las exenciones. ¿Y por qué no tenemos una norma generalizada? ¿Por qué tengo que decir que mi renta es baja y necesito una ayuda? ¿Por qué mi trabajo no sirve para poder defenderme? Sé que hay gente que vivirá de ayudas y que está controladísimo. Pero si yo trabajo todo el día, lo que quiero es que me permitas. Con más o menos humildad. Ahora me limitas y tengo que pedir una ayuda con la parte de las rentas bajas. ¿Y por qué tengo que pedir?
– ¿El Ayuntamiento les ha consultado su parecer durante la tramitación de la ZBE?
– No.
– ¿Le habría gustado que se pusiesen en contacto con ustedes?
– Claro.
– ¿Cree que habrían cambiado algo?
– Posiblemente no.
– Un estudio elaborado por una empresa de GPS en 2024 decía que Vitoria era la ciudad de España donde era más complicado conducir. ¿Coincide con ese diagnóstico?
– Vitoria es una ciudad difícil para moverse en estos últimos tiempos. Creo que tenemos una saturación de señalética: marcas viales, señales... Está claro que cuando pasas tres veces por el mismo sitio ya te lo sabes. Pero cuando no es así puedes meterte en el carril del BEI sin darte cuenta y te sales. Hay varios puntos que son conflictivos. En la zona del Seminario ves las marcas viales si vas solo, pero si tienes a alguien delante el carril te obliga de golpe a ir a un sitio y resulta que te has colocado mal. Es una situación que podía haberse evitado.
– ¿Qué otros puntos conflictivos ve en la ciudad?
– La zona de Los Astrónomos, Jacinto Benavente, Santa Lucía... En esa rotonda, la inercia de salida es hacia el BEI. Las señales también tienen que ser intuitiva. En Zumabide hay dos o tres rotondas en las que hay que ceder el paso cuando estás dentro de la rotonda. La inercia de de que e, que está en el interior de la rotonda tiene preferencia hace que ahí paren los dos: el que tiene que ceder dentro y el que viene por fuera por si acaso.
– El año pasado, el Consistorio aseguró que los tiempos para recorrer al sur se habían reducido en un 20%. ¿Tiene esa sensación?
– Creo que no. Creo que es parecido. Al final, los conductores intentamos optimizar el tiempo y muchas veces, en previsión de que se formen atascos, callejeamos. La gente se busca la vida. Muchas veces no adelantas nada porque los recorridos son más largos. Tenemos otro problema con los atascos que se están creando a la altura de Aretxabaleta. Es la única salida de Vitoria hacia Treviño, hacia Rioja Alavesa... Los coches se están desviando por dentro de Aretxabaleta. La gente se desvía porque las calles no dan para absorber ese tráfico.
– Ahora que se habla de la ampliación del tranvía a Zabalgana, ¿siente que hay puntos donde colisiona el tráfico rodado con el metro ligero?
– Hay un punto en el que los atascos son continuos. Cualquiera que entra a Vitoria por Portal de Foronda piensa que está ya. Y en el tramo desde la comisaría de la Ertzaintza a la rotonda de Honduras pueden ser 20 minutos en total. Ahí están las frecuencias, la sincronización de los semáforos. Ya estaba el plan de hacer una rotonda subterránea y ya dijimos algo en su día.
– ¿Rescataría ese proyecto para la rotonda de América Latina?
– Sí.
– ¿Y la ronda sur?
– Eso tiene difícil solución, porque habría que hacer una salida en torno a la universidad, donde el IVEF, que saliera directamente después de Gardélegui. Se podría hacer.
– En campaña electoral se planteó.
– A mí me parecería correcto. Hay que descongestionar tráfico ahí.
– Queda año y medio para que acabe la concesión de la AP-68. Algunas comunidades han anunciado que no cobrarán peajes, pero aquí todo apunta a que sí.
– Sabemos que hay que mantener las carreteras y que hay que financiarlas. Creo que los peajes tienen que ser asumibles; ya se pagan muchos impuestos. Lo idóneo sería que fuesen gratuitas, pero puedo entender que haya que financiarlas.
– ¿6,70 euros es un precio razonable para ir de Vitoria a Bilbao?
– A mí me parece caro para el que la utiliza habitualmente. No es un precio alto para el que baja de vez en cuando.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
El enigma de las plantas de tequila en la 'Catedral del vino' de Cigales
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.