Los vitorianos se echan a las piscinas en la primera jornada de buen tiempo

¡El agua está que muerde! Así ha empezado la primera jornada de piscinas de Vitoria. Se respiraban las ganas por darse el primer chapuzón, sobre todo entre los más pequeños, pero el agua aún está «helada». Teresa Díez de Valdeón, Mª Carmen Plágaro y Mariluz Sánchez, son un grupo de amigas que han decidido acercarse a la piscina de Mendizorroza «a tomar el sol, porque meterse al agua es para valientes», ha secundado Mª Carmen que había metido el pie para valorar lo fría que estaba la piscina.

Y aunque el resto también ha sacado sus bañadores a relucir, los únicos que se han atrevido a darse el chapuzón han sido los más pequeños. «¡Yo tengo ganas de bucear!», ha voceado el pequeño Ibai, que no veía el momento de escacubillirse de las manos de su madre, Erika Sáez, y tirarse a la piscina. Lo mismo con su hermana, Magi, que se había adelantando a su hermano y ya estaba como pez en el agua. «Hemos visto que iba a hacer bueno y hemos decidido venir con un grupo de amigos para pasar el día y comer aquí, pero el agua se la dejamos a los txikis», ha explicado Esti Pena.

En un sábado que las temperaturas han alcanzado los 25 grados, aunque aún es pronto para el chapuzón, las piscinas de Mendizorroza y Gamarra ya estaban recibiendo bastantes visitas. Asier Hernández y Mikel Zabalegi, de 22 y 20 años respectivamente, son scouts del grupo La Esperanza. «Hemos decidido reunir a unos cuantos del equipo y venirnos a la piscina hoy para pasar el día y hacer algo diferente», aunque al igual que los mayores rehúsan al baño. «Nos quedamos en la hierba tomando el sol y jugando con la pelota», ha señalado Mikel, haciendo de portavoz del grupo.

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