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El Palacio de Justicia ultima su estrategia para el día en que pueda reconectar su engranaje. Sin fecha conocida para su arranque, lo único seguro es que le aguarda un escenario complejo. El estado de alarma, vigente desde el 14 de marzo, ha supuesto la ... suspensión de 1.905 vistas ya programadas en Vitoria y de otras 104 gestionadas por la sede de Amurrio. 2.009 en total. Desde este lunes, además, se recogerán nuevas demandas. Los procuradores han registrado para esa primera jornada «algo más de 130 nuevos asuntos».
Sin apenas funcionarios en los juzgados, con los jueces y los letrados de la administración de justicia (LAJ) sacando sentencias desde sus hogares, los rectores del Palacio de Justicia trabajan en una desescalada rápida, segura y que, ante todo, regatee el colapso de esta institución básica. Antes de la pandemia, en sus estancias se resolvían del orden de 3.000 sentencias y autos cada mes.
Según ha sabido en exclusiva este periódico, la opción más probable apunta a la celebración de juicios también por las tardes. Se piensa en esta fórmula inédita por una doble razón; encajar las vistas de marzo y abril suspendidas por el confinamiento y espaciar los horarios con el fin de evitar aglomeraciones en el edificio. Una vista oral por el cierre de una empresa, por ejemplo, puede congregar a toda una plantilla. En los juicios en la Audiencia Provincial se convoca en la misma mañana hasta una docena de testigos. Y, salvo los protegidos, todos aguardan turno en el pasillo. Los pleitos también se celebrarán en salas separadas, para aumentar las distancias.
Al frente de esta empresa de reconstrucción se encuentra el decano de Vitoria, el magistrado José Luis Núñez. «Lo primero es la seguridad. A partir de ahí tendremos que idear cómo celebrar las vistas y encajar las suspendidas, teniendo en cuenta que algunos juzgados tienen señalamientos ya fijados para junio, julio o incluso septiembre», ilustra. Penal 1 incluso ya tiene algún día de diciembre reservado.
En su radar aparece el próximo martes como fecha clave. Ese día se espera que el ministro de Justicia Juan Carlos Campo aporte un nuevo abanico de pautas a seguir. En la actualidad sólo se resuelven asuntos urgentes, como las causas con preso.
En comparación con otras ciudades del entorno, Vitoria presenta unos números saneados en cuanto a asuntos por resolver. Aparte, los magistrados han aprovechado estas semanas de barbecho para sacar adelante trabajo pendiente. «Continuamos trabajando pese a que carecemos de medios telemáticos. Ahora estamos notificando sentencias, pero no al ritmo que nos gustaría porque sólo hay un funcionario en la oficina presencial y el resto no tiene medios para teletrabajar», expresa Mercedes Guerrero, la presidenta de la Audiencia Provincial de Álava.
«A partir del lunes los abogados y procuradores podrán presentar demandas, algunas de ERTEs que afectan a trabajadores. Sin embargo no se les podrá dar una respuesta rápida porque carecemos de medios», insiste. Desde hace días, el equipo dirigido por Núñez trabaja en un retorno escalonado del personal.
Cuando el Palacio, que cuenta con 27 juzgados más los dos de Amurrio, vuelva a rodar aguardará además una montaña de asuntos en fase de tramitación. 5.235 en total. A ellos se suman otros 1.008 sin incoar (en su fase embrionaria).
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