Vitoria envía un bus con respiradores a Marruecos

«Estábamos preparando todo para llevar la UCRI a Guinea Bissau y de repente pasó lo de Marruecos. Los equipos sanitarios de allí sabían de la existencia de este equipo dotado de camillas, respiradores, aire acondicionado, electricidad y nos preguntaron si podíamos echar una mano. Y allí está ahora, en un campamento en Tarudant, en un valle al sur cerda del Atlas. Allí es que hasta los hospitales han sufrido daños», relata el especialista vitoriano. La idea es ceder el tráiler durante dos o tres meses.

Las unidades de cuidados respiratorios intermedios (UCRIS) fueron una de las grandes revelaciones de la pandemia. Son el paso previo a una UCI y allí se trata a personas que están graves pero que no van a aguantar el ser intubadas por su estado de salud y que con oxigenoterapia de alto flujo o ventilación mecánica no invasiva han superado la enfermedad. Vitoria presentó en octubre la primera UCRI móvil un objetivo solidario: ayudar a países emergentes con el reto de salvar entre 1.000 y 2.000 vidas al año.

La idea surgió en la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) cuyos miembros encomendaron Egea iniciar «acciones de cooperación internacional». El jefe de la Unidad de Sueño de la OSI Araba y presidente de la Federación Española de Sociedades de Medicina del Sueño se puso en contacto con los dueños de Alegría Activity, la firma vitoriana que monta unidades sanitarias móviles, que se ofrecieron a diseñar un tráiler con las mismas características de una UCRI convencional y equipamientos de alta tecnología cedidos por grandes marcas sanitarias. Han recibido apoyo de Osakidetza, el Ayuntamiento de Vitoria y la institución Celedones de Oro.