Vitoria tendrá la solución para desatascar el tráfico del Sur a principios de 2023

El equipo de gobierno (PNV-PSE) ha sacado a contratación el último estudio sobre el tráfico en el Sur, que debe plantear la solución e, incluso, trazar la línea de la nueva carretera, en caso de que la considere necesaria. El plazo de presentación de las ofertas durará «unas semanas» y, una vez adjudicado el encargo, el análisis se realizará en un máximo de «cuatro meses». Es decir, si los pasos administrativos se cumplen, el informe llegaría a manos del gobierno municipal en torno a febrero del próximo año.

El análisis, que costará cerca de 85.000 euros, deberá arrojar «una solución más o menos definitiva para las próximas décadas para los desplazamientos ese-oeste», ha asegurado el alcalde, Gorka Urtaran, que ha mencionado la rotonda de Esmaltaciones y las calles Iturritxu, Maite Zúñiga y Tanis Aguirrebengoa como algunas de las más sensibles.

El recién encargado estudio, que será elaborado por una empresa externa, analizará los flujos de tráfico actuales y medirá el efecto de las recientes modificaciones en la zona Sur, destinadas a «dar más fluidez» a la circulación con carácter inmediato. «Pero debemos preguntarnos si van a ser capaces de dar respuesta al crecimiento del futuro», ha remarcado Urtaran, quien ha vuelto a «descartar» el trazado de la Ronda Sur original, que atravesaba Olárizu e implicaba una elevada factura ambiental.

El trabajo que realice la empresa escogida estará «supervisado por los técnicos del Centro de Estudios Ambientales, del área de Movilidad y otros departamentos, que tienen que dar el visto bueno», señala el alcalde.

Por otra parte, en la misma línea de tratar de desatascar el Sur, el Ayuntamiento ha sacado a concurso el desdoblamiento de un tramo de la calle Tanis Aguirrebengoa, justo antes de llegar a la rotonda de La Antonia. El equipo de gobierno destinará 146.000 euros para crear una segundo carril de «casi 100 metros» desde el Mineral hacia La Antonia «para que el acceso a la glorieta se haga de forma mucho más ágil», confía el regidor, que detecta en ese punto uno de los «cuellos de botella» de la ciudad. La obra, una vez ejecutada, tardará 3 meses, por lo que su finalización se prevé para diciembre o enero del próximo año.