Vecinos de Gorbeialdea registran 5.500 alegaciones a las fotovoltaicas

A todas esas «alegaciones populares» hay que sumar otras 250 páginas de carácter más técnico que cuentan con el refrendo de expertos. «Ellos han elaborado informes y peritajes para mostrar la evidencia de que los proyectos que nos amenazan destruirían la riqueza natural de nuestros pueblos de manera irreversible», explicaron Ruiz de Azúa e Iturralde. «Estamos aquí para advertir a Solaria de que no van a destrozar Gorbeialdea y recordar a las instituciones su obligación de proteger la naturaleza y el modo de vida de todo Álava por encima de intereses económicos de grandes empresas y sus indecentes intentos de chantaje», añadieron.

Otros ayuntamientos y concejos del territorio histórico están apurando los plazos para registrar sus alegaciones ante el Ejecutivo autonómico. La Diputación, por su parte, solicitará modificaciones en el proyecto inicial de la línea de alta tensión para que la afección a la biodiversidad y los terrenos de cultivo sea la menor posible.

Pero los responsables de la Administración foral también están a la espera de reunirse con los dirigentes de Solaria en próximas fechas como la pasada semana sucedió con la delegada del Gobierno en Euskadi, Marisol Garmendia. Y es que los portavoces de la empresa han transmitido en los últimos días que estaban dispuestos a incorporar alguna clase de cambios a sus planes iniciales conscientes de la dificultad que tendrán para desarrollarse.

La compañía defiende que el trazado planteado inicialmente «es fruto de las restricciones fijadas por el operador de la red que obligan a Solaria a evacuar su energía en Bizkaia». Y que debido a este criterio, aseguran, han tenido que realizar una reserva de inversión de «más de 45 millones de euros para la construcción de la línea». Asimismo, añaden, el recorrido iba a permitir «dar servicio a empresas que demanden energía en el trayecto de la misma», es decir, que se pudiesen «enchufar» a la red