Urtaran quiere que los nuevos bloques de viviendas de Olárizu no ocupen más suelo que los derribados

Esa nueva urbanización «debería intentar ceñirse a la huella de anteriores edificaciones», según ha trasladado la concejala de Territorio y teniente de alcalde, Ana Oregi (PNV), en la comisión del área de este lunes. Como ha apuntado, algunas de las alternativas que se presentaron en el consejo de la sociedad municipal Ensanche 21 eran «invasivas» con el parque, pero el gobierno municipal busca ajustarse en lo posible a esa 'huella' de los viejos bloques «sin tocar de manera significativa» el parque de Olárizu, una de las grandes joyas del Anillo Verde vitoriano. «La mejor manera es consumir el menor suelo sin invadir el parque».

En términos económicos, eso sí, el número de viviendas que permitiría recuperar esa inversión inicial rondaría las 380, según ha apuntado Oregi. Porque el objetivo es recobrar por lo menos una porción de la millonaria inversión realizada en su día por Ensanche 21 con dicho Plan Renove. «Supuso más de 19 millones y con el derribo casi 20. Es mucho dinero y debemos intentar recuperarlo», ha subrayado la responsable del Gabinete Urtaran, que ha ofrecido explicaciones a petición de toda la oposición (EH Bildu, PP y Elkarrekin Podemos).

Este periódico adelantó la alternativa más rentable de las cuatro analizadas en su día por Ensanche 21, la cual proyectaba levantar 356 viviendas en cinco bloques, cuatro en régimen de vivienda tasada y el resto de VPO. Las otras tres soluciones planteadas en el mismo informe causarían pérdidas; una de ellas (ya descartada) proponía reformar parte de las 124 viejas casas mientras que otra preveía construir un número más limitado –220 nuevos pisos–.

Los técnicos municipales trabajan en diferentes alternativas con los «condicionantes» mencionados de no ocupar más superficie que la que tenía la antigua urbanización, que fue reducida a escombros en verano, informado Oregi. En este momento la parcela está ya despejada y ha sido cubierta con una capa de grava. Algunos de los moradores ilegales (en torno a una veintena) que se establecieron en las infraviviendas se han trasladado a una cercana fábrica abandonada.

Con todo, ha recordado la concejala de Territorio, cualquier propuesta para levantar una nueva urbanización en ese terreno requerirá de una modificación del Plan General de Ordenación Urbana. Para ello será necesaria una mayoría política. El PP ha ofrecido su apoyo al gobierno para un plan urbanístico «sin invadir el parque, consumiendo el menor suelo posible y con una construcción equilibrada de vivienda», ha reseñado el concejal Miguel Garnica. La ausencia de viviendas de alquiler social (todas serían de compra) en los proyectos planteados ha centrado las críticas de Félix González (EH Bildu) y Óscar Fernández (Elkarrekin).