La UAGA sostiene que no hay temporeros para tirar la uva que exige el Consejo de Rioja

Con el apoyo de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de La Rioja (UPA), las entidades a ambos lados del Ebro emitieron ayer un comunicado en el que aseguraron que «el plazo entre la notificación y la fecha límite para actuar es insuficiente» para eliminar los excedentes. Entre otras cuestiones, porque «falta mano de obra para realizar el aclareo, puesto que el personal se encuentra trabajando con otras campañas frutícolas». Esto es, no hay cuadrillas de temporeros suficientes para acometer esa labor en los catorce días que otorgó el Consejo Regulador el pasado 23 de agosto –el plazo expira el 6 de septiembre–.

Todo ello, por lo primero que criticó la UAGA; porque el sistema de inteligencia artificial incorporado en esta campaña «ha sido aplicado tarde». El sindicato alavés afea en esa comunicación que las normas de campaña fijaban los avisos para las «fechas próximas al envero» y, sin embargo, las misivas están llegando «a las puertas de la vendimia».

Los entes agrarios de las dos comunidades afirman, además, que han detectado «manifiestas incoherencias» en la aplicación del sistema de inteligencia artificial. En concreto, el programa ha llegado a señalar explotaciones «donde ha habido heladas, viñas afectadas con pedrisco o con mayor vegetación». Incluso se sostiene que «parcelas que ya habían sido cosechadas en verde han recibido carta por sobreproducción».

Por ello la UAGA y la UPA concluyen que «la predicción de producción basada en inteligencia artificial no es fiable en muchos casos», que «carece de la precisión necesaria» y «requiere de mucha mejoría». A todos estos problemas, se suma a ojos de estas entidades otra amenaza: una posible pérdida de calidad en la uva y el vino por el aclareo tan próximo a la vendimia.