Txagorritxu abrirá a finales de noviembre las urgencias pediátricas del nuevo edificio

La clave reside en hacerlo manteniendo la actividad hospitalaria, muy intensa ahora por la llegada de las enfermedades respiratoras estacionales y la necesidad de acortar las listas de espera generadas a causa de la pandemia. El primero de estos servicios sensibles que se trasladará al nuevo bloque serán las urgencias pediátricas. Está previsto que estén operativas para finales del mes de noviembre, a partir de la semana del 22, sin día fijo, según revelan fuentes sanitarias.

Lo de empezar por los niños tiene una sencilla explicación. Cuando estalló la primera ola del Covid en febrero de 2020 y el HUA se vio duramente golpeado, hasta el punto de haber llegado a tener más de 300 pacientes ingresados a la vez con neumonías bilaterales, las urgencias pediátricas y de mujeres embarazadas se separaron de las del resto. Desde entonces entran por el vestíbulo principal de Txagorritxu y se les atiende en la primera planta, donde se han habilitado unas simpáticas salas de espera pintadas con los animales preferidos de los pequeños. Pero llegan a pediatría las temidas bronquiolitis de los bebés y vuelve a ser necesario mover las urgencias, por lo que se ha decidido que ya se instalen en su destino definitivo. Durante un tiempo, es posible que las familias tengan aún que entrar por el 'hall', comunicado ya con el edificio nuevo.

Antes, a partir de la semana del 8 de noviembre, está previsto que comience el tralado de los almacenes a uno de los sótanos del inmueble. Tras las urgencias pediátricas, le llegará el turno a las de adultos. Las siguientes en tener que preparar las mudanzas serán las UCIs y así con una cadencia de dos o tres semanas se irán poco a poco llevando al nuevo espacio equipos tan delicados como los que rodean las mesas quirúrgicas o las incubadoras de neonatos. Se trata de movimientos tan complejos que los gestores del centro calculan que serán necesarios entre seis y ocho meses antes de que el nuevo edificio se encuentre a pleno rendimiento.

El equipamiento sanitario cuenta con un muelle de carga al que podrán acceder los vehículos de transporte especial, sanitario o de los proveedores que abastecen de material de todo tipo a la OSI Araba, organización que integra los hospitales y los centros de salud de Vitoria. En esta planta se ubicarán asimismo las cocinas, los almacenes, la lencería, las salas de esterilización y la central de lavado.

Las nuevas Urgencias, por las que pasan cada año 80.000 pacientes, están a ras de calle, o sea, a cota cero (nivel menos uno sobre plano) y contarán con 20 consultas y más de 60 boxes. El primer piso (segunda planta) está reservado para la nueva unidad de cuidados intensivos (UCI) con 31 camas y la de cuidados intermedios, con otras 18. Tiene continuidad dentro de Txagorritxu, ya que está conectada a los nuevos hospitales de día y hematología.

La planta tres albergará todo el bloque materno infantil, incluidas las salas de dilatación y paritorios, una bañera, dos quirófanos, unidad de neonatos, cuatro camas para críticos y la demandada UCI pediátrica. Se fusionará con el resto de ginecología y pediatría, reubicados en el edificio central en forma de cruz. La planta cuarta será la de los quirófanos y la unidad de recuperación anestésica. Y sobre ella irán todas las instalaciones y la central de procesamiento de datos. El edificio lo construye la unión de empresas UTE formada por Tecsa, Altuna y Uria, Murias y Olabarri y está presupuestado en 50 millones de euros.