«El turismo en bici se ha disparado y Álava tiene que aprovecharlo»

-Defina qué es una vía verde. ¿Son iguales aquí, en Álava, que por ejemplo en Francia?

-En España están exclusivamente sobre antiguos trazados ferroviarios, en Europa el concepto es más amplio, por ejemplo hay caminos de canal. En general deben reunir unas condiciones; que no tengan mucha pendiente, ser seguras, accesibles.

-¿Cada vez tiran más las vacaciones en bicicleta?

-El cicloturismo ha consolidado y aumentado la tendencia que ya existía pero ha pegado un gran subidón con la crisis sanitaria, se ha disparado, sobre todo los viajes próximos que están haciendo que la gente descubra su territorio. A estos nuevos clientes les ha gustado la experiencia, quieren repetir y la recomendarían, según testimonios directos de gestores de vías verdes en Europa. Por ejemplo, las salidas de un día han subido un 40% en Alemania, primer destino cicloturístico del mundo. Francia, que es el segundo y puja por ser primero, ha tenido un crecimiento muy destacado. La tendencia se va a mantener, nuestros asociados así lo confirman.

-En vías verdes, Álava tiene su joyita con el Vasco-Navarro. ¿Cómo ve la infraestructura de la provincia?

-Álava ha apostado por los recorridos verdes, entre otros, integrando las vías verdes. Tiene una red muy importante y tiene que aprovechar ese tirón. Yo le veo un gran potencial.

-¿Cómo mejoraría esa red?

-Ese potencial tiene que ir aparejado con servicios y actividades complementarias en las rutas. Álava puede utilizar la gastronomía, por ejemplo con una cata de quesos en el Vasco-Navarro. Las vías verdes están en zonas que tienen la dificultad de que tienen pocos servicios, y ahí está el reto. Darle una segunda oportunidad a territorios que estuvieron en crisis y tienen otra oportunidad de revivir.

-¿Cómo será la temporada vacacional de este verano?

-Se cree que la situación se va a mantener, con turismo más local o de corta distancia, pero el cicloturismo y las vías verdes son la alternativa ideal, porque es de naturaleza, activo, para familias, jóvenes, mayores... Son viajes que nunca se olvidan y la mayoría de quienes lo prueban, repiten.

-¿Qué ofrecen otros países?

-Se están incrementando los viajes de corta distancia y algunos están transformando su infraestructura. La oferta es cada vez más digital, con realidad virtual, imágenes en 360º... En el Loira puedes alquilar bicis en una oficina de turismo y dejarlas en la de otra localidad. En Irlanda, el Great Western Greenway ofrece paseos en barco, piragua...

-¿Qué papel juegan las bicis eléctricas en el turismo?

-El incremento de ventas ha sido exponencial con la crisis sanitaria, con lista de espera. Estudios demuestran que son beneficiosas para la salud y que además la coges más a menudo. Es muy buena opción para viajar. Las vías verdes son llanas, pero los alojamientos o servicios están a unos kilómetros y no siempre al mismo nivel y una eléctrica te da mucha garantía.

-¿Qué nos falta para tener la cultura ciclista de Dinamarca?

-Primero la infraestructura segura. Aunque en Vitoria y Álava es muy buena. Además, allí se inculca desde la infancia, como transporte para ir al colegio. Por ejemplo, los taxis daneses incluyen portabicis. En Francia e Italia tienen trenes específicos para viajar con la bicicleta.