'Tula', el primer corto de Bea de Silva, premiado en el festival de Houston

La historia de una chica de apenas 14 años que cree estar embarazada cautivó al público estadounidense tanto como lo hizo hace solo unas semanas en la casa de esta precoz cineasta. «Le está yendo muy bien en festivales de España. Ya hemos tenido alegrías muy grandes como su selección en Medina del Campo, donde lo estrenamos, y ya nos han seleccionado en Lanzarote, que es clasificador para los Goya», destaca De Silva de su obra financiada por la Diputación, el Ayuntamiento y la Fundación Vital.

Producida por Extrapictures y CSC Films –la productora de su hermana Katixa–, está ambientada en un colegio femenino, cuando su protagonista vomita en el baño. La primera señal de alarma que, además de los lógicos miedos, despierta en ella multitud de dudas sobre sexo.

En ese instante es cuando aparece la mujer que da nombre al corto. La limpiadora que se interesa por el estado de la joven y le despeja todas aquellas incógnitas que no le habían explicado en clase. «No estoy soprendida del premio porque me parece que es una historia muy universal. Es algo que interesa a nivel social y a lo que en Estados Unidos se presta mucha atencion», explica de su evidente contenido de crítica a la falta de educación sexual.

Al final todo toma un carácter cómico, el secreto para su directora de su éxito. «Hacer reir y llorar es lo más difícil. Si una comedia está bien hecha es perfecta para conectar». De ficción irá su próximo corto, 'Hadas', para el que, dice, también rodará en Álava y contará con Eider González, su primera actriz protagonista. «Era su debut. Estoy muy satisfecha y orgullosa de su trabajo». Al mismo tiempo, también trabaja ya en un documental sobre refugiados ucranianos y ya sueña con su primer largometraje, que llamará 'Todos los colores a la vez'.