El estudio contratado por el Gobierno vasco desaconseja ombinar el tranvía y los urbanos para el servicio nocturno. Rafa Gutiérrez

Transporte público en Vitoria

El tranvía nocturno se descarta por costar el triple que el gautxori pese a ganar 11.000 viajeros

El estudio contratado por el Gobierno vasco afirma que combinar las líneas de Euskotren y Tuvisa aumenta los usuarios un 8%, lo que «no compensa»

Miércoles, 11 de septiembre 2024, 00:42

El tranvía nocturno empieza a ser una quimera en Vitoria. La opción de combinar el metro ligero y los gautxoris de Tuvisa durante las madrugadas ... de viernes y sábados se ha encontrado con el contundente estudio contratado por el Gobierno vasco, que asegura que esta dualidad «no es ventajosa» para la capital alavesa. ¿Pero en qué se basa esa conclusión tan rotunda? El documento, elaborado por la consultora Leber y al que ha tenido acceso EL CORREO, estima que el aumento de la demanda se traduciría en 11.726 nuevos viajeros al año. La cifra refleja un 8% del total de los urbanos, que desplazaron a 157.873 personas de madrugada en todo 2023. La factura, sin embargo, se triplicaría hasta los 828.000 euros. Para los autores del estudio, ese margen positivo de viajeros «no compensa» el gasto que requiere.

Publicidad

El análisis técnico, que ha costado 42.000 euros más IVA, arroja que activar las dos líneas del metro ligero (Ibaiondo-Salburua y Abetxuko-Universidad) supone una inversión de 614.000 euros sólo en el metro ligero. A esa cifra habría que sumar el coste de los gautxoris que seguirían en funcionamiento para cubrir los recorridos a los que no llega la vía férrea urbana. La diferencia entre la elevada factura y los ingresos que aportarían los nuevos vecinos acentúan aún más el déficit del servicio nocturno, que cuadruplicaría los números rojos que ofrecen los gautxoris (de 170.369 a 548.668 euros de pérdidas).

Ante este escenario, la pregunta que surge siempre es dónde está el equilibrio entre la mejora del transporte público y su rentabilidad social, por un lado, y la búsqueda de una cierta sostenibilidad económica. Según el informe, esa frontera se encuentra todavía lejos de los dos supuestos analizados con el tranvía. Y es que las estimaciones de los técnicos apuntan a que cada tranvía nocturno desplazaría a 60 o 70 viajeros, lo que los expertos de Euskal Trenbide Sarea (ETS) consideran «cifras de autobús, más que de tranvía».

70

Viajeros desplazaría cada tranvía nocturno. Los técnicos creen que son «cifras de autobús»

El metro ligero vence en accesibilidad y emisiones, pero pierde en paradas a demanda y ruido

Pros y contras

El estudio, que no contempla los picos de demanda de La Blanca, cuando más se utiliza precisamente el bus nocturno, coteja un total de cuatro posibles escenarios. Entre ellos figura la oferta actual de gautxoris, que es la que sale mejor parada con una puntuación de 9,8 sobre 10. Le sigue un modelo con pequeñas variaciones en las líneas de autobús (un 9,6) y, a mucha distancia, las dos alternativas que incluyen el metro ligero. Una de ellas sólo contempla activar el recorrido Abetxuko-Universidad, que reduce la nueva demanda potencial sólo a la mitad (cerca de un 3% de incremento), ya que la mayor parte de los nuevos viajeros se subiría al ramal de Salburua.

Publicidad

Propuestas de mejora

La principal rémora que arrastran las opciones con el tranvía se encuentra en los 23,7 euros que cuesta cada kilómetro de servicio de este medio de transporte frente al reducido retorno económico a través de los billetes. Eso sí, cabe matizar que los cálculos se basan en los precios del ticket del autobús, mientras que el viaje habitual en tranvía es algo más caro. En cualquier caso, la diferencia tampoco se antoja determinante. Y es que el desembolso no es el único hándicap del metro ligero, ya que carece de capacidad para realizar paradas a demanda por motivos obvios y es más ruidoso que los urbanos. Eso sí, gana por goleada en accesibilidad y bajas emisiones.

En este sentido, el informe técnico se decanta por mantener el modelo actual e introducir algunas mejoras en el futuro, sin retocar demasiado los gautxoris de Tuvisa. Se trata de incorporar autobuses eléctricos para reducir el ruido y las emisiones, y ampliar el «área de influencia» con los recorridos.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Accede todo un mes por solo 0,99€

Publicidad