Los 102 trabajadores de la residencia Arabarren deberán ser cooperativistas

El 'casting' servirá para buscar a 102 trabajadores, entre los que se incluyen once enfermeras, 64 auxiliares y, entre otros, nueve empleados para servicios generales como la limpieza o la cocina. También se necesitarán médicos, fisioterapeutas, psicólogos, terapeutas ocupacionales... Obviamente habrá una estructura jerárquica, una dirección sociosanitaria y un consejo rector que vele por el correcto funcionamiento de este servicio, aunque la asamblea dispondrá de la última palabra sobre cuestiones trascendentales para el futuro de Arabarren como sociedad.

En tres meses tendrá que estar preparado el personal para atender a cien internos y otros 25 usuarios más que acudirán al centro de día. Por eso, se activará a partir de hoy una página web (www.arabarren.eus) para que los interesados envíen sus currículos y de manera paralela habrá una empresa externa que se encargará de la selección del resto de personal. Las condiciones de trabajo que se han fijado «mejoran el convenio más favorable que actualmente existe en la provincia», el de Cáser-Alto del Prado, y también contarán con determinados derechos extraordinarios como cooperativistas.

Una vez que se elija a la futura plantilla -se dará prioridad a los profesionales sociosantiarios que vivan en el territorio histórico- recibirán tres tipos de formaciones. La primera será a cargo de la Diputación y su nuevo modelo de cuidados Gizarea, que está centrado en reforzar las relaciones personales y que en la actual residencia foral de Lakua ya ha servido para reducir el consumo de psicofármacos entre usuarios. La segunda será para que la gente se 'empape' del espíritu cooperativista y sus beneficios. La última se centrará en aprender los sistemas de gestión del nuevo centro, ya que se pretende innovar con sistemas digitales para tratar de perfeccionar el modelo de atención.

Por módulos

Las obras de Arabarren están a punto de concluir y hasta final del presente año tocará equiparlo adecuadamente. Se trata de un equipamiento dividido en módulos de 25 personas, un aspecto que se decidió antes del estallido de la pandemia pero que ha ganado importancia tras la triste experiencia del coronavirus. Cincuenta serán para perfiles psicogeriátricos (Alzheimer, demencias...), 25 para personas envejecidas con discapacidad intelectual y la misma cifra para personas con alguna clase de enfermedad mental. Además contará con un centro de día para otros 25 usuarios. «Todas esas plazas serán públicas y estarán concertadas con una cooperativa de iniciativa social como Arabarren», subrayó el diputado de Políticas Sociales, Emilio Sola (PNV), en una reciente comisión en las Juntas Generales.

Ese mismo modelo público-privado se extenderá en el siguiente geriátrico que se abrirá en Álava. El ahora denominado 'Arabarren II' estará situado en el barrio de Salburua y contará con espacio para 120 usuarios, además dispondrá de un centro de atención diurna. Ese mismo espacio albergará una unidad de investigación sobre el envejecimiento, ya que la provincia aspira a ser «pionera» en este aspecto.