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No hay mascarilla que valga. El TMEO salpica con su humor, desde los juegos verbales a la escatología más descarnada, en todo momento y ocasión. La veterana revista, que a cuenta de la COVID-19 se ha encontrado con uno de sus principales canales de ... distribución, los bares, cerrado, no ha querido faltar a su cita bimestral. Así que ha lanzado su 'Especial puto virus', con una portada de Piñata donde un individuo da palmas en el cuarto de baño y, al ser interpelado, responde que se dedica a «aplaudir a los sanitarios», ante el retrete y el bidé.
El primer extra digital del TMEO «en nuestros 33 años de historia» se puede adquirir en el enlace https://payhip.com/b/rMUE y su precio es la voluntad. La misma con la que el fanzine, pese a las circunstancias, ha dejado de cobrar a los anunciantes -esencialmente, comercios y bares- en esta ocasión.
Los 'temeístas' presumen de no haber reciclado materiales para las 84 páginas de este especial. Pero también es cierto que Mauro Entrialgo le ha dado la vuelta a un cómic de la Liga de la Justicia o ha puesto a un espectro femenino a explicar que «en esa curva me maté yo», mientras un tipo ve la evolución de los contagios en la tele.
Y mientras Furillo aporta peculiares consejos sobre vestimenta o disfraces en esta coyuntura, Ata caricaturiza a rostros del 'parte' como Fernando Simón, Grillante presenta páginas 'confinadas' o Rastamán repasa remedios caseros.
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