Del tajo a la maratón por la 'almendra'

La pareja de Michelin, Asier del Pozo y Alberto González, seguidos por otras dos de Pepsico e IDE fueron los primeros en dar la vuelta a la 'almendra' en un itinerario que les llevó desde la salida en la calle Postas a través de Nueva Fuera, la 'Herre' o la 'Corre' hasta la meta ubicada en la plaza de la Virgen Blanca. Mención a parte mereció Osakidetza, reconocida como la organización que aportó más entusiastas corredores.

Una contrarreloj intensa que, enmarcada dentro de la agenda de Vital Eguna y que cuenta con la colaboración de la Diputación, el Parque Tecnológico de Álava y EL CORREO, se consolida así como una cita capaz de congregar gran expectación con multitud de público animando a sus allegados sobre los cuatro kilómetros y medio de recorrido.

A pocos minutos del pistoletazo de salida, los informáticos de Serikat hacían piña junto a la meta. «Es la primera vez que hacemos la carrera en Vitoria», contaba Aitor Uria, que ya había participado en anteriores años en Bilbao y que reivindicaba que, a pesar del teletrabajo y de horas y horas sentado, el gremio se cuida. «Yo mismo salgo a correr tres veces a la semana». Su compañero Eneko ya le entraban las dudas de como afrontaría el grupo subir la cuesta de San Francisco a pleno 'sprint'. «Menos mal que tenemos Aitor para tirar de nosotros», decía con sorna.

Mercedes y Michelin, las dos principales empresas vitorianas, también se dejaron ver. De la factoría de Zabalgana salían Alberto, Mari Asun e Iñaki, un trío con muchas horas de pista de atletismo. «Tenemos que guardarnos un poco porque mañana también tenemos la carrera contra el cáncer de mama», contaba Mari Asun. Y recién salidos de cargar neumáticos Josu agradecía este recorrido. «Es más bonito y hay más gente. Mejor que el año pasado, que fue por Miñano».

Y pese a ser una carrera dada a las coñas con el compañero de oficina, a la prueba también acudieron algunos de los que conviven entre aulas y pupitres. Para dejar el pabellón de su universidad bien alto, estaban Uxue, Lola, Gorka, Álvaro y Uma. «También venimos por la camiseta y la toalla», bromeaba Álvaro. «A ver que también nos gusta correr», le replicaba entre risas Uma.