Sólo tres alaveses informan a Hacienda de sus criptomonedas en el extranjero

La cifra es exigua, pero no es menos cierto que era previsible que lo fuese. Para poner coto a estos activos, Álava alumbró un nuevo modelo tributario -el 721- que se adaptaba a esta propiedad: a los criptoactivos. Todas las personas con criptomonedas debían rellenar ese formulario con la información de sus inversiones en monedas digitales al cierre de 2023.

Pero bajo esa realidad, hay dos factores que sacan de la ecuación a muchos contribuyentes. La primera es que la obligación de informar a Hacienda sólo rige para quienes sumen un patrimonio de más de 50.000 euros en estas criptomonedas. La segunda es que hay operadores de estas divisas (Binance, Crypto.com o Bitbase, entre otros) que ya están registrados en el Banco de España como empresas del sector. Al estar sometidas al paraguas del banco central, deben aportar la información que Hacienda les solicite y no contabilizan como inversiones en el extranjero.

Según la Encuesta de Competencias Financieras del Banco de España, el 3,97% de los vascos tienen criptomonedas en propiedad. La extrapolación deja la cifra global en 74.000 personas en la comunidad autónoma y, de arrastrarla al ámbito territorial, más de 7.500 alaveses contarían, a priori, con dinero invertido en estos activos.

Expertos consultados por este periódico subrayan que, pese a todo, es difícil encontrar a personas que tengan más de 50.000 euros y lo tengan fuera de plataformas ya registradas ante el Banco de España. Ante la entidad que preside Pablo Hernández de Cos hay listadas 80 empresas dedicadas a la compraventa de este tipo de activos.

No obstante, no hay que olvidar que fue precisamente en el territorio donde dio arranque una gran operación de la Guardia Civil para desmantelar una estafa mundial de criptomonedas. Quien dio la voz de alarma fue un alavés que acudió a la sede de la Benemérita en Sansomendi para denunciar un timo mediante el que le habían sutraído 35.000 euros.

La lucha contra las monedas digitales está entre los nuevos pilares del plan diseñado por la Hacienda foral para combatir el fraude fiscal en 2023. Ese programa de la Diputación, además, lleva incluido desde hace varios años el desarrollo progresivo de un software para analizar 'big data' y detectar patrones de fraude fiscal.

A diferencia de la durísima crisis por la que pasaron en el arranque de la guerra de Ucrania, las criptomonedas llevan desde 2023 al alza. El principal activo digital, bitcoin, empezó el año pasado en el entorno de los 15.000 euros. Hoy, sin embargo, su precio es de más de 63.000 euros después de alcanzar su valor más alto el pasado 5 de marzo.

El momento más duro desde que la moneda goza de popularidad llegó tras la quiebra de la plataforma FTX, una de las más importantes en el intercambio de monedas. Ahora, en cambio, goza de buena salud. En buena medida, porque la SEC -el equivalente en Estados Unidos a la Comisión Nacional del Mercado de Valores- ha permitido la creación de fondos que cotizan en bolsa y que están directamente ligados a la criptomoneda más famosa del mundo.