El pasado año murieron 2.970 alaveses, según el Eustat. El vacío que dejaron se llevó en la intimidad. Y es que la muerte y el duelo siguen siendo temas de los que no se habla. Esta semana se celebra el día mundial de los ... Cuidados Paliativos y la asociación Babespean, dedicada a mejorar la atención a personas con enfermedad avanzada y el acompañamiento en el duelo, ha organizado dos conferencias. La psicóloga Nerea Alonso alertó ayer contra la presión social y la 'prisa' hacia las personas que sufren. Le acompañó Naroa Martínez, especialista en ayudar a niños que han perdido a un padre o una madre. Mañana será el turno del médico y compositor Pedro Sosa y su 'Sanar desde el dolor'. (Dendaraba, 19.00 horas)
- ¿Somos capaces de imaginarnos la vida sin nosotros?
- Es una de las cuestiones que rodea el tema de la muerte; la capacidad que tenemos las personas para tener la fantasía de que no vamos a fallecer o al menos no ser conscientes de ello. Y lo que buscamos en los encuentros con la ciudadanía es sentarnos, reflexionar; hablar sobre la muerte ajena y la propia, tomar conciencia...
Tiempo al tiempo
«Es difícil acabar en una depresión. Confundimos la patología con un proceso natural»
- ¿Hablar de ello nos prepararía mejor frente a una ausencia?
- Por supuesto. Luego hay que ver la forma de ser y las necesidades de cada uno, pero hablar ayuda, para prepararnos y también para, dentro de las posibilidades que hay, intentar elegir cómo quieres vivir tu propio final o el de un ser querido. Es una forma de empoderarte, amortiguar el impacto emocional de una pérdida.
- ¿Los alaveses estamos preparados para el duelo?
- Vivimos en una sociedad en la que este tema es aún tabú y nos cuesta mucho hablar de ello. Hay mucho desconocimiento, nos da miedo. Muchas veces me encuentro en la consulta con personas que simplemente no saben qué hacer con el dolor. Creo que tenemos más capacidades de las que pensamos, pero que no somos capaces de hablar de ello.
De frente
«No nos damos tiempo para la tristeza. Hay gente que viene sólo por la presión social»
- ¿Cuándo debemos pensar que algo no va bien en un duelo y que esa persona necesita ayuda?
- La gente cuando viene al inicio de un duelo lo que solemos hacer es psicoeducación; es decir, explicar cómo es el proceso, cómo va a sentirse, cuál va a ser el camino a recorrer... Eso les da control y tranquilidad. Hace falta una intervención si cuando han transcurrido unos meses una persona detecta que en algún ámbito de su vida a nivel social, laboral o de pareja nota cierto bloqueo, algo que le impide funcionar como era antes. Sobre todo cuanto va pasando el tiempo y la intensidad de ese dolor perdura..
- Sin ayuda ¿el duelo puede acabar en depresión?
- Es difícil acabar en una depresión. Confundimos mucho depresión y duelo y no es lo mismo. Lo primero es una patología y lo segundo, un proceso natural. Mire, en esta sociedad en que vivimos es normal que una persona mayor pierda a su pareja y te vienen los hijos diciendo 'es que la ama se queda en casa y ya le digo que tiene que salir, hacer cosas...' Igual la ama lo que necesita es estar en casa, en su refugio, consigo misma y eso no quiere decir que vaya a caer en una depresión... Necesita hacer un acto de introspección para sanar y luego volver otra vez a conectar.
Lo más difícil
- Vamos, que no dejamos a las personas estar tristes.
- Eso es, no nos damos tiempo. Vivimos en una sociedad de la inmediatez, en la que estamos saciados constantemente y no toleramos bien los tiempos largos. Queremos correr y no nos damos margen. Hay gente que viene muchas veces con un duelo normal y viene sólo por la presión social. 'Es que han pasado cuatro meses y estoy mal' ¡Y a lo mejor te lo dice una persona que ha perdido a la pareja con la que ha estado 40 años casada!
- ¿Hay duelos más difíciles?
- Influyen muchos factores. Si se pierde a una persona muy joven nos resultará tremendamente injusto y doloroso. Si es alguien mayor, pues nos parece más asumible. Si es un hijo, por supuesto es muy difícil. O que tengas factores económicos o que sea una pérdida traumática, que no te has podido despedir, que haya sido una enfermedad muy larga y con mucho sufrimiento, una negligencia...
- ¿Se puede aplazar un duelo?
- Mire, ocurre a veces con un perfil de mujer de mediana edad que empieza a preocuparse por un padre, por los hijos, por otros hermanos... Somos más cuidadoras y estamos más a los demás, pero la mente es inteligente y cuando ya dejas encarrilado lo que más te preocupa, que quizá son los que consideras más vulnerables, te puedes permitir atenderte a ti, porque el duelo no caduca, eso está ahí.
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.