Un simulacro nocturno cerrará el túnel de Isuskitza, que conecta Álava y Gipuzkoa por la AP-1

Un simulacro en el túnel de Isuskitza, el más largo de todo el País vasco con una longitud de 3.415 metros y que conecta Álava con Gipuzkoa, obligará al cierre nocturno de la AP-1 entre Eskoriatza y Luko en la madrugada de este viernes. Por este motivo, la autopista permanecerá cerrada en ambos sentidos entre el enlace de Eskoriatza (punto kilométrico 123,500, en tierras guipuzcoanas) y el enlace de Luko (punto kilométrico 107,000, en la provincia) desde las 22.30 horas del jueves hasta las 03.00 horas del viernes. El corte comenzará a las diez y media de la noche en sentido Vitoria y treinta minutos después en dirección Eibar.

La Diputación alavesa ha detallado las alternativas que tienen los conductores ante este cierre temporal. Así, para el tráfico proveniente de Eibar en dirección Vitoria, los vehículos deberán tomar la salida 123 de Eskoriatza y continuar por la GI-627 y la A-627. Para quienes circulen en dirección Eibar se recomienda utilizar la N-240 y la A-627 hacia Eskoriatza. Al objeto de reducir el impacto entre los usuarios de la autopista, el simulacro se realizará en horario nocturno. Además, a partir de las seis de la tarde de este jueves, los paneles de mensajería variable en las autopistas AP-1, AP-8, AP-636, A-15, A-1 y en la carretera N-240 avisarán del cierre previsto.

Este ejercicio tiene como objetivo «evaluar y fortalecer la respuesta de los equipos de emergencia en el túnel, medir su rapidez y coordinación en situaciones de emergencia y asegurar la correcta aplicación de los protocolos establecidos», detalla la institución foral. En el simulacro participarán efectivos de los parques de bomberos de Álava y Gipuzkoa, la Ertzaintza, SOS Deiak y servicios sanitarios. El ensayo también permitirá afinar la coordinación entre los responsables del túnel, gestionado por Bidegi y la concesionaria Arabat.

Este simulacro es parte del cumplimiento de la Directiva 2004/54/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, que establece la obligatoriedad de realizar «ejercicios de seguridad» en túneles de más de 500 metros en la red transeuropea de carreteras, a la que pertenece la AP-1/AP-8.

El túnel de Isuskitza, inaugurado en 2009, dispone de dos tubos paralelos con dos carriles en cada sentido y soporta un tráfico medio de 17.712 vehículos diarios, con un 22% de vehículos pesados, según los datos recogidos en el año 2023. Equipado con once galerías de emergencia (tres de ellas habilitadas para el paso de vehículos), esta infraestructura cuenta además con apartaderos, sistemas de iluminación, ventilación avanzada con sensores de calidad del aire y opacidad, sistemas de extinción de incendios, señalización interna y externa, cámaras de videovigilancia, megafonía, postes SOS y un sistema de radiocomunicaciones.

Su gestión y monitoreo se realizan desde el centro de control de Ondartza, en Bergara, que supervisa tanto la AP-1 como la AP-636.

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