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Desde Zabalgana a Mariturri, la cicatriz rasga hasta seis garajes comunitarios. En la Avenida de la Ilustración, Reina Sofía, Labastida, Derechos Humanos para cerrarse en la calle Oyón. Otra noche de furia a cargo de los ladrones de coches. Según fuentes internas de la ... Policía Local, la madrugada del martes, desconocidos desvalijaron «unos 25 automóviles», todos estacionados en sus plazas bajo tierra. El lunes 8 hubo otro ramillete de seis denuncias, concentradas en un aparcamiento subterráneo de Coronación.
Ayer, al bajar a sus plazas, la escena se repitió. Los propietarios de los vehículos siniestrados frunciendo el ceño ante el desalentador panorama. Una de las ventanillas rotas, casi siempre delantera, tras ser apalancadas con algún objeto punzante. Probablemente un destornillador. La Policía Local se ha hecho cargo de la investigación de los últimos asaltos.
Los amigos de lo ajeno revuelven con saña el interior de los turismos. «No necesitan mucho tiempo. En apenas diez-quince minutos pueden acceder hasta media docena», deslizan agentes consultados. De ahí pasan al siguiente parking. La hora preferida abarca entre las dos y las tres, en días laborables, cuando Vitoria duerme.
en los últimos 15 días
No hay patrón en cuanto al automóvil más susceptible de ser desvalijado. El hilo conductor de esta nueva oleada de hurtos subterráneos se refiere a los botines. El ladrón o ladrones, apenas se llevan la calderilla que encuentran o pequeños objetos no siempre valiosos. En algunos vehículos, por ejemplo, los investigadores de la Policía Local han hallado los GPS sacados de sus fundas pero intactos.
«Son mucho mayores los destrozos causados para acceder al interior que los botines obtenidos», comparten fuentes policiales sondeadas por este periódico.
De hecho, se trabaja en la hipótesis de que, a pesar del común modus operandi, «varios grupos» anden detrás de esta ola que ya ha alcanzado cinco barrios en los últimos quince días. Arrancó en Arana, continuó por Lakuabizkarra y El Batán para trasladarse a Coronación, Zabalgana y Mariturri.
Las denuncias tramitadas en las dos últimas semanas entre la Policía Local y la Ertzaintza, según ha podido averiguar este periódico, «superan los setenta coches» saqueados. Sí hay imágenes, captadas por cámaras de seguridad, de algunos de los ladrones.
No dejan huellas dactilares en los vehículos. «Siempre usan guantes». De ahí que fuentes internas de ambos cuerpos apelen a la colaboración ciudadana. «Fíjense al entrar y salir del garaje que la puerta se cierra sin que nadie entre. Avisen sin tardanza al 092 o al 112 si observan movimientos extraños en su garaje o en el interior de su bloque».
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