Salvatierra traslada desde hoy su mercado semanal

Marta Peciña

Martes, 9 de junio 2020, 08:31

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Esta mañana, el ambiente del mercado de Salvatierra se trasladará de la plaza de San Juan, su espacio habitual, a la plaza J. Pérez de Lazarraga, donde se colocan las barracas en fiestas. «Estarán todos los puestos juntos y es el lugar más idóneo para que se puedan guardar las distancias de seguridad porque cumple todas las garantías, según nos indican los técnicos. En la plaza de San Juan, era imposible», explicó ayer el alcalde, Ernesto Sainz Lanchares.

El espacio permitirá albergar a la media docena de puestos de alimentación que ya habían vuelto a la cita en Salvatierra hace tres semanas. Estos puestos fueron los primeros en recuperar la actividad cuando se permitió una ocupación del 30% siguiendo las indicaciones del Gobierno vasco. La docena de puestos de textil que empezarán a trabajar hoy, verán por fin atendida su petición para volver al trabajo. Serán todos los que habitualmente se desplazan hasta Agurain cada semana y contarán con «los aparcamientos que hay cerca, en Apategi y Senda Langarika para la gente que viene desde los pueblos, aunque no está en el casco histórico», precisó el alcalde.

Aunque todos los puestos estarán en la misma ubicación, habrá dos espacios diferenciados, para alimentación por un lado y textil por el otro. Además, los huecos que ocuparán están señalizados en el suelo para que mantengan las distancias entre ellos exigidas por la normativa sanitaria. Además, habrá un punto por donde se podrá entrar al mercado y un recorrido en su interior así como una zona de salida para evitar aglomeraciones.

«La idea es que esta ubicación sea provisional, pero veremos cómo reacciona la gente», explicó Sainz Lanchares que en cualquier caso, se mostró dispuesto a reactivar la actividad en el casco histórico con otras iniciativas. Inicialmente, también se planteó la posibilidad de separar los puestos del mercado en función de su actividad y distribuirlos entre las plazas de San Juan y Santa Clara, pero finalmente la idea quedó descartada porque los mismos interesados prefieren estar juntos «y de esa forma, atraen a más gente».