La residencia de estudiantes del campus de Vitoria abrirá en 2025 con 196 plazas

Iñigo Crespo

Sábado, 4 de noviembre 2023, 01:09 | Actualizado 08:27h.

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La escasa oferta de alojamientos universitarios que Vitoria arrastra desde hace años recibirá un importante balón de oxígeno en el curso 2025-26. Será ese verano, a priori en septiembre, cuando abrirá la residencia de estudiantes en el campus de la UPV-EHU. El nuevo recurso se levantará en las dos parcelas circulares que están situadas a ambos lados de la facultad de Economía y Empresa, en la calle Comandante Izarduy, en la manzana del antiguo Hospital Militar. Contará con 196 camas, divididas a partes iguales en los dos edificios.

El proyecto, elaborado por los arquitectos David Martínez e Itziar Regalado, comenzará a convertirse en realidad en el primer trimestre de 2024, cuando está previsto que arranquen las obras. La superficie total del equipamiento será de 5.800 metros cuadrados, según confirman los autores. Se trata del máximo que permite la parcela en una altura máxima de tres plantas y un ático. Las mismas fuentes sostienen que el Consistorio ya cuenta con el «proyecto básico», y se encuentran en la fase final del diseño definitivo, que esperan tener concluido antes de que finalice el presente año.

Con los plazos fijados, la construcción de la nueva residencia confirma que ha dado un considerable acelerón respecto a las fechas límite que había marcado el Ayuntamiento, propietario de los terrenos, ya que exigía a los promotores tener la residencia en marcha como muy tarde en 2028. Con el proyecto encauzado, la larga espera del campus para contar con un alojamiento que dé servicio a su alumnado tocará a su fin en apenas dos años.

La posibilidad de que las parcelas situadas junto a la facultad de Economía y Empresa acogieran una residencia había sobrevolado en repetidas ocasiones en los últimos años. De hecho, el Ayuntamiento estuvo a punto de adjudicar los terrenos a una empresa en 2020, pero ésta renunció tras el estallido de la emergencia sanitaria. En la segunda ocasión, el pasado marzo, entregó los terrenos a Falon Investments, que los gestionará durante 75 años (el máximo permitido) a cambio de un canon anual de 60.000 euros. El argumento económico fue uno de los que más pesaron para la adjudicación de los suelos, ya que la cuantía superó en un 20% lo que solicitaba el Consistorio. Pero no fue el único, ya que la calificación energética del equipamiento obtuvo una elevada puntuación.

La apertura de la residencia descargará la elevada demanda de alojamientos para universitarios. De hecho, las 196 camas que se repartirán en habitaciones de hasta tres plazas suponen casi duplicar los recursos actuales. Y es que la oferta residencial que existe a día de hoy en el campus alcanza las 220 plazas, muy lejos de los más de 8.000 alumnos.