«Regularizar la prostitución da carta libre a los proxenetas»

Mabel Lozano (Toledo, 1967) apenas se identifica ya con esas etiquetas de 'modelo' y 'actriz' que tanto le persiguen. «Yo soy directora de cine. Y llevo dos décadas luchando contra la explotación sexual y la vulneración de los derechos humanos», dicta tajante. En 2021 su trabajo fue reconocido con un Goya por su 'Biografía del Cadáver de una Mujer', el crudo relato de tres mujeres prostitutas que, pese a haber conseguido la condición de testigos protegidos, no pudieron escapar de una muerte brutal. En febrero, hace escasos meses, volvió a hacerse con la estatuilla por 'Ava', la historia de una joven colombiana que acabó siendo captada por una red de trata sexual a través de un anuncio de Internet. Sobre esa «migración» a las fronteras digitales impartirá esta mañana un taller en la Academia Vasca de Policía y Emergencias, Arkaute, dentro de la jornada 'Parez-Pare: Trata, Prostitución y Pornografía. Viejos y nuevos retos de fenómenos conexos'.

– ¿La prostitución en la calle va a desaparecer?

– No del todo, pero va a ser residual. La prostitución está en internet y vamos a hacer una migración a esas fronteras digitales. Tenemos una tendencia a separar muchísimo la trata sexual, la prostitución y la prostitución 2.0 (el porno), pero en la realidad no es así. Para mí, es el triángulo de las Bermudas porque la trata es la cantera donde se extrae la materia prima para prostituirla y la pornografía es prostitución filmada. Mira las caras de esas mujeres. No hay europeas, son casi todas migrantes (rumanas, colombianas, brasileñas, dominicanas, nigerianas...) que vienen buscando una oportunidad.

– Para frenar ese acceso a la prostitución, el Gobierno aprobará una ley para proteger a los menores de ese tipo de vídeos.

– No es suficiente porque también estamos viendo cosas que están haciendo los menores. La última, una manada de chavales en Madrid que ha violado a una niña. ¿Por qué un chaval de doce, trece o catorce años quiere salir a violar? ¿Dónde lo ha aprendido? En la pornografía, que es absolutamente misógina, sexista, racista.

– ¿Así se normaliza la violencia?

Claro. Y lo legitiman porque son nativos digitales. Además de que también ocurre porque nadie les habla de la sexualidad, nadie les crea un pensamiento crítico con respecto a a la educación sexual. Eso no existe en nuestro país. Si los padres no son referentes para sus hijos en ese tema, la pornografía adquiere ese papel porque es aceptada, accesible y adictiva. Si un chaval está viendo 24/7 un supermercado de cuerpos: altas, bajas, morenas... viendo contenidos que son violentísimos y muy misóginos con las mujeres, luego, ¿dónde te crees que van cuando tienen veintipico años? A la prostitución.

– Usted es partidaria de abolirla, pero no siempre lo ha sido. ¿Qué ha cambiado?

– Fue cuando conocí y trabajé durante años con un proxeneta condenado y sentenciado por prostitución coactiva y trata de seres humanos. Él me decía: «Yo a la gente que escucho hablar de regularizar la prostitución pienso que no hay ni que corromperlos, piensan igual que pensamos nosotros». Fíjate, así de claro. Es decir, los proxenetas desde siempre han querido regularizar la prostitución para que no se lleven a las mujeres, para que no les hagan preguntas.

– ¿Qué ocurre en los países donde está regularizada?

– Que la trata se ha cuatriplicado. En Alemania anuncian dos perritos calientes, tres polvos, dos mamadas y tres cervezas por 50 euros. La prostitución es una forma perversa de vulneración de derechos humanos y de violencia hacia las mujeres y, regularizarla, da carta libre a los proxenetas porque les da una maleta de derechos.

– 'Ava', su último documental, expone bien esas ideas.

– Ava, que es una niña muy vulnerable porque arrastra un trastorno emocional, fue captada por Facebook por un proxeneta español y explotada en un piso frente a la Catedral de Palencia. Por eso aquí hay que poner el foco en dos cosas. En lo lucrativo, y sobre todo, que todos los días veinte hombres compraban tranquilamente a esta menor, con la mochila terrible que arrastraba en su vida. Siempre estamos hablando de que esto es un negocio en manos de delincuentes, pero esto tiene que ver con una cosa importantísima. Con la ley de la oferta y de la demanda. Si se demandan niñas, se captan niñas. Es así.

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