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jesús nicolás
Domingo, 12 de septiembre 2021, 03:17
El viernes el precio de la luz alcanzaba su máximo histórico (de momento, porque es un récord que se bate casi cada semana) y costaba 159 euros el megavatio hora. Y esta escalada se suma a la lista de obstáculos que la pandemia ha puesto ... al sector terciario alavés. A comerciantes y hosteleros la factura les ha subido de media un 43% este verano, según aseguran los dueños de los 50 negocios encuestados por la asociación Gasteiz On. La patronal Aenkomer también ha hecho su propio sondeo entre 200 negocios de todo el territorio que sitúan ese incremento en el 35%.
Son cifras muy preocupantes para ambas organizaciones, tanto que Aenkomer advierte de que amenazan con «ahogar» al pequeño empresario local. «El margen comercial se estrecha», agregan desde en Gasteiz On. Pues, según su encuesta, si antes de este verano la factura media de la luz rondaba los 450 euros, el sablazo asciende ahora a los 645. Así, el 64% asegura verse «muy afectado».
Esta subida no la han sufrido todos por igual. Para la hosteleríaha sido la guinda a una mala racha. Si no tenían suficiente con las restricciones de aforo, ahora les toca capear con la factura más alta, que ha ascendido desde los 604 euros de media que pagaban antes del verano a los 877 euros de este agosto. 273 euros de diferencia, el equivalente a 210 cafés servidos en terraza. Según Aenkomer, un insorportable 44% más. Gasteiz On detalla que la factura de los comerciantes ronda los 298 euros. Mucho menos que los bares, puesto que su consumo eléctrico es menor.
Edurne Parro
Gerente de Aenkomer
Dentro del sector Aenkomer hace un desglose algo más exhaustivo y coloca a los negocios de imagen personal como los más afectados. La mitad de los encuestados de este gremio que incluye peluquerías o salones de estética aseguraron haber padecido un incremento en su factura de más del 50%.
A estos le siguen los establecimientos de alimentación, de equipamiento de la persona y del hogar. Los menos afectados serían los del sector servicios. En las pequeñas oficinas el montante a pagar apenas ha fluctuado y se mantiene en torno a los 187 euros de acuerdo con Gasteiz On.
En conjunto, los diferentes negocios tienen complicado abaratar su factura. «La luz es un gasto fijo al que no podemos renunciar y sobre el que tenemos poco margen de maniobra», explica Diego Martínez de San Vicente, presidente de la asociación de comerciantes. Para ellos es imposible consumir en los tramos 'valle' –de las 00.00 horas a las 8.00 horas–. «En los hogares se pueden poner los electrodomésticos cuando la tarifa es más barata, pero en los comercios, en la hostelería o cualquier oficina no podemos elegir el horario», denuncia.
En el mismo sentido, Aenkomer advierte que esta subida llega en un momento «muy sensible» cuando el consumo «está todavía lejos de la recuperación tras la pandemia» e invita a sus asociados a que «negocien con los proveedores de electricidad y establezcan tarifas fijas hasta que la situación se estabilice». Confían en que se regule de nuevo el mercado.
Diego Martínez de San Vicente
Presidente de Gasteiz On
Pero, ¿qué nivel de dependencia tiene el comercio alavés de la luz? Lo cierto es que es algo realmente difícil de medir. En la encuesta de Gasteiz On apenas veinte personas contestaron a la pregunta de qué porcentaje de sus gastos fijos representa la factura de la luz y menos personas todavía confesaron que fuera muy elevado. Seis de ellos (40%) lo suponían entre el %3 y el 5%, cuatro empresarios lo situaron entre un 20% y un 25%, tres lo calcularon en el 30% y una única persona manifestó que la luz representa el 45% de sus gastos fijos.
En medio de esta espiral de precios ascendentes a la que, de momento, no se vislumbra un fin próximo, urge encontrar maneras de reducir el consumo. Y si bien es cierto que se puede hacer con pequeñas acciones orientadas al ahorro de energía, poco margen de maniobra hay. Con unos precios tan disparados, todo lo que se plantee se quedará en un mero 'parche'.
Así lo ven también la mayoría de comercios, que confían más en que el fin de la pandemia traiga pronto un aumento del consumo y de los ingresos. Según el sondeo de Gasteiz On, el 42% de los encuestados no contempla tomar medidas para abaratar su factura. Por contra, el 22% va a cambiar de compañía eléctrica o ya lo ha hecho, el 6% quiere bajar su consumo a base de pequeñas acciones, el 4% cambiará su potencia y otro 4% cambiará sus instalaciones por otras de bajo consumo. A esto se suma un notable 12% de indecisos.
Lo que sí tienen más claro es que el Gobierno debería de implementar medidas inmediatas para paliar la situación. Las dos sugerencias más mencionadas por los encuestados fue aprobar más ayudas a las pymes o crear una empresa pública de electricidad.
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