El rechazo del PP encamina a Vitoria hacia la prórroga presupuestaria

«No ha habido voluntad de llegar a un acuerdo», censuraba la portavoz popular Ainhoa Domaica en una comparecencia ante los medios que fue convocada de urgencia. El PP presentó en diciembre una serie de propuestas por valor de 15 millones de euros a los interlocutores del Gobierno. No obtuvo, al parecer, una respuesta concreta hasta el lunes. Y acabó con la negociación. El Ejecutivo municipal ajustó su oferta a 3 millones, una cuantía similar a la que permitió el año pasado el pacto del Gabinete Urtaran con Elkarrekin Podemos. Frustrado el acuerdo, los populares optarán por enmiendas parciales.

«No han aceptado ni las propuestas ni las cuantías», incidió Domaica. Entre sus exigencias había puntos como la apertura de una nueva OPE en la Policía Local, iniciativas en materia de empleo, un plan 'Bono Denda Vitoria-Gasteiz' o la concesión de dos horas gratis para estacionar en parkings municipales vinculado a compras en comercios locales. La hoja de ruta de los populares también incluía posicionamientos políticos como el 'no' a los vertidos de amianto en Gardelegi o la cesión de una parcela para un nuevo centro de salud en Goikolarra-Aretxabaleta. «No hemos visto una voluntad real de llegar a un acuerdo y nos ha costado creer que en algún momento la hubiese», arremetió la edil conservadora.

Desde los despachos de la Plaza de España se negó la mayor. Fuentes del departamento municipal de Hacienda refieren sin ambages que hay argumentos de los populares que «no se ajustan a la realidad». La oferta del PP, deslizan desde el área de Jon Armentia, era un «todo o nada».

La ruptura con los populares no es baladí para el Ejecutivo de Etxebarria. Fueron claves en la elección de la socialista y en el arranque de la legislatura han apoyado distintas iniciativas de su Gobierno. Ahora es EH Bildu el único partido al que puede recurrir para sacar adelante su proyecto de presupuestos. La ausencia de acuerdos con la coalición abertzale, que fue primera fuerza el 28-M, no invita a pensar en un pacto. Tampoco lo hace la cercanía de las elecciones autonómicas.

En el departamento de Hacienda, a 48 horas para que concluya el plazo para presentar enmiendas, se sigue negociando con los de Rocío Vitero. «De momento, hay puertas abiertas», se insiste.

EH Bildu estuvo muy cerca de apoyar al Ejecutivo el pasado otoño en su propuesta de ordenanzas fiscales, aunque finalmente no fraguó un acuerdo. En el caso del presupuesto, la coalición abertzale ha puesto encima de la mesa propuestas por un valor ligeramente inferior a esos 15 millones del PP. «La clave está más en los contenidos que en los millones», remarcan desde la formación soberanista. Ponen el foco, fundamentalmente, en vivienda, comercio (plan subvencionado para garantizar el relevo generacional) y transición energética.

En el escenario (hoy más probable) de una prórroga presupuestaria Vitoria se quedaría sin un colchón 'extra' de 24,3 millones de euros; la diferencia respecto a las cuentas municipales que manejó la ciudad el pasado ejercicio. Aunque eso sin contar con los fondos europeos que seguirán entrando a lo largo del año, lo que dará algo más de margen financiero para atender las necesidades que surjan.