Rebajan la pena a un violador que amenazó con un táser a su víctima y la robó en Vitoria

Los hechos sucedieron el 23 de septiembre de 2020. La Ertzaintza les capturó un par de días después. A uno lo rescató cuando se descolgaba del balcón del piso donde se había ocultado. Era una cuarta planta. «Llovía mucho, si no llegamos a verle se hubiera precipitado al vacío», rememoran agentes participantes en aquel operativo.

En mayo de 2022, la Audiencia Provincial de Álava castigó a este joven de 25 años a un global de catorce años. De ellos, ocho correspondían a la agresión sexual. A su compinche le cayeron siete. Tras la entrada en vigor en octubre de la Ley orgánica 10/2022, Alejandro Toribio, abogado del principal implicado, solicitó la revisión de la condena. El fallo de los magistrados Ana Zulueta, Jesús Poncela y Francisco García Romo reconoce el derecho de este preso en Zaballa a recibir una rebaja.

De esta manera, los ocho años impuestos por la agresión sexual se convierten en siete. Los otros seis años, correspondientes a los cargos de robo con violencia y amenazas, se mantienen inalterables. También le recortan en doce meses los ocho años iniciales de prohibición de comunicación y alejamiento de su víctima. Cuando cumpla dos terceras partes de su pena será expulsado a su país.

En el juicio, el testimonio de esta mujer resultó fundamental. Se trata de una trabajadora sexual a la que el principal encausado engañó para subir a su casa. «Me acuerdo todos los días de él desgraciadamente», clamó tras renunciar al biombo que la protegía de sus atacantes. «Quiero verles la cara y me da igual que me vean», dijo en sala. Desde aquel día de septiembre sufre «estrés» y ya no ejerce en la capital alavesa.