Las rampas mecánicas y ascensores llegarán a tres barrios de Vitoria

En el barrio de San Cristóbal está proyectado un ascensor en la calle Txistularis, ubicada junto a las vías del tren y que conecta con la plaza Dantzari. Una intervención valorada en 750.000 euros. «En esa zona hay ahora mismo un pasaje con escaleras, que suele estar muy sucio, que conecta con el puente de San Cristóbal», sostiene Begoña Seco, de la asociación de vecinos Hegoaldekoak. «Cerca hay una escuela infantil y mucho movimiento de carritos de niño, por lo que es una mejora que tiene sentido», añade. Será el primer ascensor en la vía pública fuera del Casco Medieval y alrededores sin contar los que existen para acceder al Palacio Europa y al centro comercial El Boulevard.

Desde la asociación vecinal, sin embargo, lamentan que esta no es una petición propia y que desde el Ayuntamiento no han contado con ellos «para nada» a la hora de elaborar el Plan de Barrios en el que está incluida la intervención. Una vez presentada esta hoja de ruta (con más de 200 actuaciones en toda la ciudad y una dotación económica de 56 millones de euros) desde el departamento de Espacio Público liderado por Beatriz Artolazabal (PNV) informan que se realizarán visitas barrio a barrio para explicar las obras en primera persona y conocer la opinión de los vecinos. «Lo que toca ahora es presentar los proyectos 'in situ' y priorizarlos teniendo en cuenta lo que nos traslade el vecindario. Un trabajo que se hará en las próximas semanas» trasladan a EL CORREO portavoces del área.

En el caso de Santa Lucía, las rampas mecánicas se colocarán en las calles Vicente Aleixandre y Los Astrónomos, y en esta ocasión sí eran una reclamación de los residentes. «Es algo que llevábamos pidiendo desde hace tiempo», confirma Juan Carlos Murua, presidente de la asociación Errekatxiki. Cada uno de los tapices rodantes costará 300.000 euros y al igual que el resto falta por definir cuándo se instalarán. El plan abarca hasta 2027. «Actualmente hay unas escaleras muy empinadas, solo aptas para escaladores», desliza Murua tirando de humor. «En este barrio hay mucha gente mayor y lo tienen difícil para pasar por ahí. Cuando se pongan las rampas será todo mucho más cómodo y accesible, aunque estamos esperando a que vengan y nos cuenten los detalles del proyecto», agrega. Lo que está claro es que la zona en la que se van a instalar es de «mucho tránsito» por parte de viandantes que se dirigen a los campos de fútbol de Los Astrónomos, al frontón e incluso al parque del Este de Salburua.

El tercer barrio al que llegará esta solución para mejorar la circulación peatonal es Aranbizkarra. Allí se colocará una rampa mecánica para facilitar el acceso al centro de salud 'Aranbizkarra II' ubicado en la calle Burgos. En la actualidad hay unas escaleras de piedra que dan a una plazuela interior, paralelas a una rampa con barandilla, pero que no es la situación más cómoda para personas mayores o con movilidad reducida.

Desde la asociación vecinal, su portavoz Guillermo Perea, se muestra muy crítico con esta intervención en el barrio. En primer lugar porque no lo consideran una actuación prioritaria y creen que con un arreglo de la rampa y las escaleras actuales sería suficiente. Y por otra parte por la falta de diálogo por parte del Ayuntamiento. «Es una tomadura de pelo. Esta rampa no es una prioridad para nosotros porque hay cosas mucho más importantes en el barrio y nadie se ha reunido con la asociación para preguntarnos», censura Perea.

Además considera que se va a invertir «un dineral» que se podría destinar a actuaciones más urgentes. En concreto la pasarela costará 300.000 euros. «Lo realmente importante los soportales queden a cota cero, que eso sí es trabajar por la accesibilidad, y es algo que están teniendo que pagar los vecinos de sus propios bolsillos».

En el proyecto para Aranbizkarra se contemplan otras actuaciones como la sustitución de los aparcabicis de la calle Valladolid por unos más modernos y una nueva vía ciclista en la Avenida de Londres.