Proveedores de Mercedes aplican ERTEs por si hay nuevas paradas en la producción

La dirección de la planta vitoriana comunica hoy si reanuda la actividad el lunes o si la falta de componentes le obliga a más cancelaciones

Juan Carlos Berdonces

Logroño

Jueves, 24 de junio 2021, 01:42 | Actualizado 07:22h.

Cuando Alemania estornuda, Europa se resfría dicen los analistas económicos. Y si la planta de Mercedes en Vitoria tiene síntomas de constipado «yo he de ... ir preparando la medicación», admite el responsable de una firma proveedora de la factoría automovilística. La multinacional lleva toda la semana con la producción parada debido a la falta de componentes, tanto semiconductores como otras piezas, que impiden terminar y dejar listas para el cliente las furgonetas que salen de la cadena de montaje.

En torno a 5.000 unidades de la Vito y la Clase V, según fuentes sindicales, se acumulan en las campas que rodean la fábrica y en terrenos del polígono industrial de Araia, a unos 40 kilómetros de la capital alavesa. Y en el mejor de los casos hasta el lunes no podrán ser acabadas.

Gestamp, en Abadiño, lleva sin trabajar toda la semana y en Faurecia, en Vitoria, ya han planteado la posibilidad de un ajuste

Pero tampoco es seguro que la producción se retome la semana que viene. De hecho, diferentes proveedores de Mercedes ya han comenzado a aplicar expedientes de regulación temporal de empleo (ERTEs) como medicina para intentar que el constipado del fabricante le afecte de la menor manera posible en caso de ese catarro continúe algún día más.

En Gestamp, en Abadiño también llevan parados prácticamente toda la semana. «El 67% de nuestra producción de piezas va para Mercedes», explica Tximi López, presidente del comité, con lo que el impacto es «importante, pero es que también otros clientes nuestros como Seat en Martorell y Volkswagen en Pamplona suspenden tres días esta semana la actividad». La industria vizcaína tiene ya un ERTE aprobado de 22 días para hacer frente a estas contingencias.

Máxima «incertidumbre»

Dentro del parque de proveedores de Mercedes tampoco hay actividad durante esta semana porque su ritmo de producción lo marca la multinacional alemana. Las diferentes empresas esperan con «incertidumbre y expectación» las noticias que han de llegar hoy de la dirección de la factoría automovilística. Quieren escuchar que el lunes vuelve la actividad pero no lo tienen nada claro «porque una crisis de falta de componentes como la actual –además de los microchips asiáticos escasean las lentes traseras o las botoneras de plástico en las que se encajan los elevalunas– no se resuelve en unos días».

En Faurecia, por ejemplo, también han puesto ya sobre la mesa la posibilidad de aplicar un ERTE entre su plantilla –proporcionan los asientos delanteros a las Vito y Clase V– en próximas fechas si la parada en Mercedes se prolonga en el tiempo. Otros proveedores internos se dan por ahora un margen de tiempo antes de hacer ajustes de jornada porque aún tienen flexibilidad suficiente.

Pero la suspensión de la actividad de la principal industria vasca también tiene consecuencias en provincias limítrofes como Burgos. Lear o Grupo Antolín también suministran componentes para las furgonetas 'made in Vitoria' y han decidido activar ya sus ERTEs ante la situación de incertidumbre que rodea a Mercedes.