Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
Terremoto político en Labastida. El candidato del PP Daniel García se convirtió ayer en alcalde durante un sorprendente pleno en el que se escenificó la desaparición del PNV en el municipio. El aspirante popular se hizo con la makila después de que el jueves estallara ... la sorpresa al anunciar su renuncia Eduardo Barinaga, el aspirante del PNV. Dimitió por «orden» de su partido para dejar gobernar a los populares, a pesar de que si se hubiera presentado tenía garantizado el apoyo de EH Bildu.
El resto de la lista del PNV en la localidad riojanoalavesa no compartía esta decisión y durante la sesión de investidura hicieron pública su ruptura con el partido entre duras acusaciones, no estaban dispuestos a apoyar al PP. Las 11 personas del grupo jeltzale de Labastida ya se han dado de baja en el PNV y los 3 ediles que obtuvo la formación en las pasadas elecciones ejercerán su labor como independientes. La consecuencia directa es que el PNV desaparece del tablero político en este municipio de 1.400 habitantes.
Ayer no presentaron candidato y con ello Daniel García se convertía en alcalde entre sonoros aplausos de buena parte de los vecinos que pudieron acceder a la concurrida sesión en el Ayuntamiento. La hasta ese momento representante del PNV, Aintzane Prieto, leyó un comunicado en el que cargaban contra Barinaga, al que acusaron de «pasar por encima de las personas que conformamos esta candidatura sin el más mínimo reparo en el daño que causa y en la situación en la que nos deja. Estamos destrozados». Tampoco escatimaron en críticas al partido: «la forma en la que el PNV ha orquestado las negociaciones desde el Euskadi Buru Batzar, con la complicidad del excandidato Barinaga, nos ha dejado sin margen para poder presentar un candidato y esto nos llena de impotencia y asco. Por eso nos desvinculamos total y absolutamente del partido».
Su segunda victoria
El pasado 28 de mayo el PP ganó las elecciones logrando 4 concejales por los 3 del PNV y los 2 de EH Bildu, unos resultados calcados a los de 2019. En aquella ocasión los dos partidos nacionalistas se unieron para arrebatar el bastión de mando al PP y formar una entente con la que han gobernado el municipio en los últimos cuatro ejercicios.
Ahora el poder vuelve a los conservadores en Labastida, uno de sus tradicionales feudos que han gobernado durante varias legislaturas pero donde los nacionalistas han ido ganando terreno en los últimos mandatos. El nuevo alcalde tiene 26 años y a pesar de su temprana edad es la segunda vez que saborea la victoria en las elecciones municipales. Este vecino de Labastida es graduado en Administración y Dirección de Empresas y cuenta con un máster en gestión de negocios internacionales. Además, ha publicado tres libros y en el plano político, aspira a dar impulso tanto al centro para personas mayores como a la vivienda, especialmente para los jóvenes. «Soy consciente de que entramos a gobernar en minoría y por eso tiendo mi mano», deslizó instantes después de recibir el bastón de mando.
Estuvo respaldado por el presidente de los populares alaveses, Iñaki Oyarzabal, que aseguró que «es el mejor alcalde que podía tener este Ayuntamiento» y por el presidente del partido en Euskadi, Carlos Iturgaiz. «Se ha hecho justicia porque era la lista más votada. Hoy se ha demostrado que el PP cumple su palabra y que el PNV no es de fiar por lo ocurrido en Laguardia», sentenció Iturgaiz.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.