Los trabajos de cosecha empezarán en las próximas semanas y el departamento de Desarrollo Económico y Sostenibilidad de la Diputación Foral de Álava ha lanzado un aviso importante. Pide a los agricultores que en caso de localizar un nido de aguilucho cenizo o pálido en los campos avisen a través del teléfono 689 23 12 11. El objetivo es proteger esta especie y asegurar su desarrollo.
Publicidad
Mediante el programa de seguimiento establecido por el Servicio de Patrimonio Natural se realizará además una detección y seguimiento de los nidos, principalmente en zonas cerealistas la Llanada, Montaña y Valles Alaveses. Una vez detectado un nido, se notificará al titular de la parcela su existencia y se le pedirá colaboración. Una opción es la colocación de un cercón, pero también existe la posibilidad de dejar una superficie sin segar a la espera de que los pollos alcancen la edad de volar. «Aunque lo más deseable será el retraso de la cosecha en toda la parcela».
Finalizada la campaña, la institución foral realizará una evaluación y establecerá una compensación económica por dicha colaboración con un pago de 50 euros por nido detectado y una compensación por retraso de cosecha de hasta un máximo de 300 euros. Esta especie hace sus nidos en el suelo y peligran las puestas y las crías del año, al coincidir con la recolección mecanizada del cereal. Por ello, «el colectivo agricultor tiene un papel muy relevante en su conservación» ha explicado la diputada foral, Saray Zárate. Si durante la siega se localizan nidos -hay que evitar la manipulación de los pollos o huevos-, se debe dejar una superficie suficientemente amplia sin segar y comunicar su hallazgo.
El pasado año se detectaron y siguieron 28 nidos de aguilucho cenizo y 6 de aguilucho pálido y se pudieron proteger y salvar 48 pollos de cenizo y 13 de pálido. Gracias al trabajo de Hontza y a la colaboración con la ONG inglesa Natural England se marcarán este año entre diez y quince ejemplares con emisores GPS, lo que servirá para mejorar el conocimiento de las especies, del uso del espacio que hacen y de las principales amenazas que sufren.
Tanto el aguilucho cenizo (Circus pygargus) como el aguilucho pálido (Circus cyaneus) son especies en riesgo, incluidas en el Catálogo de Especies Amenazadas. Ambas nidifican en el suelo, preferentemente de cultivos cerealistas como cebada, avena y trigo y se alimentan de roedores y grandes invertebrados que afectan a estos cultivos. Por ello, realizan una gran labor de control biológico de plagas y mantienen a raya algunas especies para evitar la superpoblación.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.