Piden 12 años de cárcel al acusado de violar a una menor de 15 años en el pantano

Y la que fuera amiga íntima de la víctima y exnovia del encausado declaró a favor del segundo. «No me creí que la hiciera nada porque si te violan estás mal», alegó para incurrir a continuación en varias contradicciones respecto a sus declaraciones anteriores durante la investigación del caso.

Pese a este testimonio discordante, la Fiscalía de Álava mantuvo su petición de doce años de prisión –dejando abierta la opción de un abuso sexual, lo que supondría diez años– y una indemnización de 20.000 euros para la víctima. La acusación particular también reclamó doce años y elevó a 30.000 euros el montante por el daño moral. En cambio, la defensa solicitó la absolución al entender que hubo sexo consentido y que la denuncia –que tardó meses en producirse– respondió a «un sentimiento de culpa» de la menor.

Los hechos enjuiciados en la máxima instancia judicial de la provincia se remontan a la primavera de 2019. La declarante de ayer pidió a la víctima, entonces su «amiga íntima», que quedara con su novio para revertir su reciente ruptura. Ese joven es el encausado. No se conocían y el contacto se hizo en redes sociales.

El ahora investigado la llevó en su coche al pantano –ninguno atina cuál– y bebieron «media botella» de un licor de 35 grados de alcohol que la dejó grogui. «No recuerdo nada, salvo sentirlo encima de mí», afirmó en sala la semana pasada. Luego la dejó cerca de la casa de su amiga, donde contó lo sucedido. Tardó meses en denunciar porque «ni mi papá ni yo teníamos papeles y temía que nos deportaran». Aunque el sospechoso siempre ha negado cualquier agresión, en el juicio sí reconoció «unos besos». Le saca diez años.

Ayer, el fiscal Manu Pedreira recordó que «hay dos versiones. La víctima siempre ha mantenido un relato y el acusado ha dado tres». Al acabar, este joven y la testigo que se suponía clave abandonaron juntos el Palacio de Justicia de la Avenida de Gasteiz.