El 1 de enero de 2019 siempre será recordado en la comisaría de Aguirrelanda por la carga policial en las inmediaciones del Gaztetxe. Casi a la misma hora, los pocos efectivos que quedaban disponibles se concentraron en el monte de la tortilla, donde se ... escondieron tres jóvenes acusados de intentar robar en un coche y en una urbanización de la cercana calle Mendizabala.
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El dueño de un turismo les sorprendió en plena tentativa y los siguió desde la distancia para marcar su posición a la Guardia urbana. De manera casi paralela, una llamada al 092 alertó de que este grupo también había tratado de acceder a un bloque de apartamentos colindante.
Dos de estos presuntos ladrones se pasaron en la mañana de ayer, viernes, por el Juzgado de lo Penal número 1 de Vitoria para responder por estos hechos. El tema era serio ya que uno de ellos –todos son magrebíes– se enfrentaba a una petición de expulsión del país.
En vista de que hasta cuatro testigos les situaron en el coche y escalando el vallado de la urbanización, sus abogados optaron por cerrar un acuerdo con la Fiscalía de Álava. Como ninguno de los encausados presentaba antecedentes penales, el Ministerio Público accedió a una pena menor a cambio de que admitieran su acción ilícita.
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Así las cosas, la jueza les impuso una condena simbólica de tres meses de prisión –que se haría efectiva si volvieran a delinquir en los próximos dos años– y a abonar al propietario del vehículo un montante de 165 euros de indemnización. En el momento de los hechos, los procesados contaban con 20, 23 y 24 años respectivamente.
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