La pandemia provoca que casi 3.000 escolares abandonen el deporte en Álava

En el año académico 2020-21, el primero tras el confinamiento domiciliario, se tocó fondo con tan sólo 14.037 apuntados. La inseguridad provocada por los contagios, el uso obligatorio de la mascarilla en los entrenamientos, los grupos 'burbuja', las limitaciones para hacer uso de vestuarios y la prohibición de realizar competiciones, además de la decisión de restringir las prácticas en repetidas ocasiones, hicieron que un tercio de los escolares abandonase las extraescolares. La Diputación -competente en esta materia- quiere que se vaya corrigiendo esta situación, aunque será complicado porque al efecto del covid se le suma la caída en la natalidad que ya es evidente en los colegios.

No se trata de un mero pasatiempo. «El deporte genera beneficios físicos, sociales y psicológicos. Estamos hablando de jóvenes en una época de desarrollo en la que necesitan relacionarse en un ámbito de ocio controlado distinto al aula. Hay que primar la salud, obviamente, pero también hay que evitar el sedentarismo y el deterioro del desarrollo óseo, muscular y cardiovascular», explica Zenón, que es vocal del Colegio Oficial de Licenciados en Educación Física del País Vasco y confía en que los casi 3.000 que se han dado de baja sigan practicando deporte junto a sus familias.

La diputada de Cultura y Deporte, la socialista Ana del Val, se muestra de acuerdo con la importancia que tiene sobre la salud el deporte en edades tempranas. Ella confiesa que estaba en contra con la última decisión de suspender el deporte escolar porque «era y es seguro», pero no le quedó otra que acatar la orden del Departamento vasco de Salud. «Hemos apostado siempre porque haya deporte escolar, y en volver más pronto que tarde a la situación anterior a la pandemia. El primer curso con entrenamientos, este segundo ya con competición y ahora trabajamos con el pensamiento puesto en que la temporada próxima sigamos recuperando jóvenes», afirma. Para eso se trabaja en estrecha colaboración con clubes, centros educativos y federaciones.

Y es que hay 78 modalidades distintas. Desde el popularísimo fútbol que juegan 4.924 estudiantes, donde apenas un 5% son chicas, hasta el tiro al arco o el billar, que practican dos personas, respectivamente.

Otros 2.252 chavales alaveses encestan canastas en categoría escolar, pero el presidente de la federación de baloncesto, Luismi Corres, reconoce que el covid también les ha pasado factura. «La caída en el número de inscritos en el deporte escolar también es extensible al federado», lamenta Corres, quien confía en que las cifras se recuperen a medida que los contagios remitan, ahora que se cuenta con la garantía institucional de que su suspensión no será la decisión recurrente cada vez que se descontrola una ola.

17.790inscritos hay ahora en el deporte escolar de Álava. 2.922 menos que antes del covid.

14.037hubo el curso pasado, cuando tan sólo se podía entrenar. No existió competición.