El organista José Santos de la Iglesia recorrerá mañana dos siglos de música en la catedral nueva

El recital, que se basará en la forma musical de la passacaglia, supondrá un recorrido temporal de más de 200 años a través de tres notables piezas. El músico alavés explica que este tipo de composición, posiblemente de origen español, tiene su origen en una danza cortesana, que evolucionó hacia una pieza instrumental y autónoma.

La 'Passacaglia en sol menor' de Louis Couperin abrirá el concierto como exponente de «una música de escritura refinada y carácter lírico e intimista». Pero esta forma de variación basada en un bajo «con entidad melódica y fundamento armónico» quedó plasmada por Johann Sebastian Bach en una creación que supone la cumbre del género.

Precisamente, la 'Pasacaglia y fuga en do menor, BWV 582' del genio germano será la segunda del programa. Está integrada por «veinte variaciones a las que se encadena una gran fuga que completa una pieza donde «Bach concilia el rigor y la fantasía de un modo vigoroso e inigualable», dentro de un cuerpo de obras barrocas donde clavecinistas y organistas aportaron «los ejemplos más hermosos y acabados».

En la selección de obras, la 'Passacaglia en si menor' de John Ebenezer West cierra el recorrido. Esta «es una obra romántica, en la que la sucesión de las variaciones constituye un contrastado recorrido por las dinámicas del instrumento, a través de los timbres y de la oposición de planos sonoros, afín a los diferentes teclados del órgano», expone el músico.

Como enlaces entre estas tres obras, el concierto plantea una serie de corales luteranas, como 'Glorificad conmigo la bondda de Dios', de Johann Nikolaus Hanff. O las dos creaciones de Max Reger «Quédate con nosotros, Señor, Op. 135' y 'Lo que Dios hace está bien hecho, Op. 135'.