El orden regresa a los puestos del mercado de Santa Bárbara

A primera hora, hacia las ocho de la mañana, se han concentrado el grueso de clientes. Ha habido alguna confusión, pero pronto se han empezado a aplicar las nuevas normas. Una única entrada por la parte de la pérgola más cercana a la plaza del lehendakari Leizaola y una única salida hacia la calle La Paz. Estos accesos y el paso entre puestos se ha delimitado con vallas, mientras que agentes de la guardia urbana vigilaban para que nadie se saltase la normativa.

«Todas las medidas que se tomen para que esto esté mejor organizado bienvenidas sean. A primera hora sí que había alguna duda, pero ,según ha ido pasando la mañana, se ha ido mejorando y agilizando el sistema», confirmaba a EL CORREO la productora Leire Ibarrola desde su puesto de quesos y miel. Allí esperaba a sus clientes habituales, no tan madrugadores como los que van a llenar el carro con verdura. «La gente viene pronto porque temen que se acabe el producto de temporada como las alcachofas o los espárragos», explicaba otra productora sin dejar de despachar.

En los postes de la pérgola se han colocado carteles advirtiendo de las normas a cumplir. «Se recuerda que, por motivos de seguridad, se atenderá a las personas compradoras de una en una, con una distancia de dos metros», se podía leer. La distancia ha aumentado respecto al jueves, cuando 'solo' se pedía metro y medio de separación. Entre los puestos la distancia existente es de cuatro metros, y seis metros de espalda a espalda. «Estamos contentos con las nuevas medidas, y la venta va muy bien», señalaba la productora navarra Olga Alcalde, que a mediodía ya había despachado la mayoría de género.

El propio concejal de Comercio, Igor Salazar, se ha acercado hasta la plaza de Santa Bárbara acompañado de técnicos municipales para comprobar el funcionamiento del mercado. Los vendedores le han trasladado sus buenas sensaciones en cuanto a ventas, algo que el Ayuntamiento de Vitoria celebra tras su apuesta por el producto local. «Desde el principio hemos apostado por este mercado, nos parecía fundamental mantenerlo garantizando las medidas de seguridad», subraya Salazar.