Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
La oposición reaccionó con una mezcla de alivio y resignación al proyecto definitivo para reformar el Teatro Principal. Por un lado, el esperado lanzamiento del concurso para renovar el interior del edificio aplacó en cierta forma al PP y Elkarrekin Podemos, que le pedían una ... mayor celeridad al gobierno local (PNV-PSE). Sin embargo, la formación conservadora le recordó el «retraso» que arrastra la obra, y el grupo morado le reprochó la «falta de consenso» con la oposición y, sobre todo, con los agentes culturales. Pero el más crítico con el proyecto escogido fue sin duda EH Bildu, que advirtió de que el escenario de la calle San Prudencio «perderá potencial» y urge a reformar el Iradier Arena para eventos de mayor tamaño.
La formación abertzale aseguró que el Gabinete Urtaran se decantó por «la peor opción y la más barata» de las cuatro que estaban sobre la mesa. «Dicen que la solución final no se parece a ninguna de las anteriores, pero casualmente cuesta siete millones y pierde 200 butacas, como la alternativa más básica», señaló el concejal Ruiz de Larramendi. La primera fuerza de la oposición cree que esa reducción del aforo se traducirá en una «pérdida de tracción» por parte del teatro. «Los espectáculos encarecerán en un 20% las entradas y otros dejarán de venir», advirtió el edil, que pidió que la reforma del Iradier «vaya un poco más rápido que el Principal», con el objetivo de absorber la programación «durante los años de obra» ser un equipamiento complementario en el futuro.
El PP, por su lado, afeó a Urtaran haber «mareado la perdiz durante siete años», en referencia a los cuatro proyectos que llegaron a sobrevolar el Principal, incluido el de integrar el edificio Ópera y derribar el teatro italiano. «Lo que necesita el Principal estaba muy claro desde 2015 y lo reclamamos desde entonces. Y encima, después de tanto retraso, hay que esperar otro año para que empiece la obra», criticó la portavoz Ainhoa Domaica (PP).
Elkarrekin Podemos, mientras tanto, lamentó la «nula participación», tanto del resto de formaciones políticas como, sobre todo, de los agentes culturales. «Es un proyecto necesario y se tiene que acometer, pero se están retratando. Nos tendremos que quedar con la parte buena, y es que parece que al fin empieza la obra», señaló la concejala Garbiñe Ruiz (Podemos).
Por su parte, el diputado general, Ramiro González (PNV), cerró filas con el último proyecto de reforma. «Es importante abordar cuanto antes esta reforma y estoy convencido de que tendrá un resultado extraordinario», dijo.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.