IÑIGO CRESPO
Miércoles, 27 de mayo 2020, 19:23
El olivo centenario de Portal de Castilla ofrece síntomas de haberse secado a consecuencia del trasplante realizado el pasado enero. El cambio de emplazamiento del centro de la rotonda a un parterre cercano, provocado por las obras del Bus Eléctrico Inteligente (BEI), suponía ... un cierto riesgo para la supervivencia del ejemplar, y así lo han confirmado los primeros meses en su nueva ubicación. El Ayuntamiento, no obstante, advierte de que el árbol «todavía no está muerto» pese a haber perdido sus hojas, y que los servicios de mantenimiento tratarán de «regenerarlo en los próximos meses».
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El olivo presenta varios «problemas», sobre todo en la humedad y el riego, aunque el departamento de Espacio Público cree que el ejemplar ofrece todavía motivos para el optimismo. En este sentido, uno de los retoños se encuentra «verde y en buen estado», después de que el deterioro se hiciera palpable a los dos meses de traslado. «El ejemplar había secado sus hojas y se había curvado hacia el interior. Se procedió a podarlo dejando esa parte de las ramas», explicó ayer la concejala de Espacio Público y Movilidad, Amaia Barredo (PNV).
Los trabajos que se llevarán a cabo durante buena parte del verano para intentar recuperarlo se centrarán en un aporte de microorganismos y bacterias de las que ahora carece el árbol centenario. También se le aplicará un tratamiento enraizante. Por su lado, la edil jeltzale resaltó que «esta especie tiene bastante resistencia y una capacidad de recuperación media».
El trasplante del olivo fue uno de los cambios ambientales más significativos que provocó la implantación del BEI, además de la tala de varios centenares de árboles y la eliminación de una parte del aparcamiento de Mendizorroza. La singularidad del ejemplar, en este sentido, se encuentra en que se había convertido en un símbolo para el barrio de Ariznabarra, después de que fuera adoptado por Vitoria procedente de La Rioja hace 16 años.
El trasplante del olivo y la tala de árboles en algunos barrios de la ciudad ha centrado las críticas de una parte de la oposición a la implantación del BEI, sobre todo por parte del PP. «El olivo seco debería ser el logotipo para el BEI. Representa como nadie lo que es ese proyecto: el despilfarro, el coste y la mala gestión. Es un atentado a la naturaleza», censuró el concejal Alfredo Iturricha, quien tachó el proyecto de «antiecológico se mire por donde se mire».
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El trazado del BEI, que sustituirá la línea Periférica, pasará también a escasos metros del monumento 'El Abrazo', de Jorge Oteiza. El Ayuntamiento, no obstante, tiene previsto mantener la ubicación de la obra, situada en el bulevar de Euskal Herria.
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