Olentzero y Mari Domingi llegan a Vitoria: «Nos llegan cartas escritas en quechua de niños de Perú»

«Tenemos todo listo tras varios días de trabajo. Menos mal que tenemos un 'auzolan' grande, una red de ayudantes y ayudantas, de galtzagorris, amigos y amigas del bosque que nos echan una mano», comentaban Olentzero y Mari Domingi en la tarde de ayer por vía telefónica a EL CORREO mientras repasaban toda esa lista de deseos de los miles y miles de vitorianos que confían en la magia de esos simpáticos carboneros y pastora.

Estos entrañables personajes navideños –«traemos siempre calor para calentar nuestras casas en invierno»– cuentan que gracias a todo ese apoyo pueden leer la gran cantidad de cartas que han recibido. Además aprenden mucho porque «cada vez recibimos cartas en más idiomas». «El nuestro es el euskera. Mucha gente que lo está aprendiendo hace el esfuerzo de escribirnos y lo agradecemos muchísimo. Pero también hay gente de diferentes culturas y nos parece superenriquecedor que nos llegue de repente una carta escrita en quechua de un niño de Perú, por ejemplo», comentan. Conscientes del gran cariño que despiertan, ningún idioma se les resiste. «Los galtzagorris son indispensables porque son políglotas y nos ayudan a interpretarlas todas».

– ¿Hay un máximo de regalos por persona?

– Si leyeras las cartas, hay alguno y alguna que nos hace una lista bastante larga (risas). Mari Domingi y yo siempre decimos que lo ideal serían tres regalos: uno para uno mismo, un capricho o algo que quieras con muchas ganas; un segundo regalo para compartir con quien quieras; y el tercero para ofrecérselo a un persona que no puede, al que no tiene regalos y lo necesita.

Más allá del consumismo, estos personajes apelan a «regalar amor». «Es importante acordarnos de aquellas personas que están solas, llamarles, invitarlas a tomar algo y a cenar con nosotros. Y también ser solidarios con esos niños y niñas que sufren la guerra».

Este carbonero grandullón de txapela y camisa de cuadros también le da un pequeño tirón de orejas a los más mayores. «Tienen que poner más atención porque a veces se quedan hipnotizados con las pantallas y tienen que pasar tiempo con sus txikis», comenta.

Tanto Olentzero como Mari Domingi coinciden en que el brillo de los ojos, tanto de adultos como de menores, demuestra que la ilusión atraviesa diferentes generaciones estos días. En esta tarde del 24 de diciembre su aclamada kalejira desfile irá acompañada del grupo Judimendiko Joaldunak, lecheras, carboneros, leñadores, pastores, dantzaris, herboleras, y el espectáculo itinerante 'Haizearen lorategia-The wind garden', adaptado al universo mitológico vasco.

La esperada visita obligará a que el estacionamiento en la capital alavesa permanezca prohibido entre las 06.00 y las 21.00 en diferentes calles (Olaguíbel, en el tramo comprendido entre las calles Estatuto de Gernika y La Paz; en Portal de Legutiano, junto al número 31; Raimundo Olabide, junto al número 27: Las Trianas, en el tramo comprendido entre Raimundo Olabide y el número 13 de Las Trianas, en sentido al centro de ciudad), además de la circulación por las vías del recorrido y cruces adyacentes, entre las 17.00 y las 19.15 horas, aproximadamente.