Okupas de los bloques de la Avenida de Olárizu han vuelto a poner en riesgo su vida para continuar con el expolio de este inmueble de titularidad municipal. Vecinos legales, que residen en los edificios de enfrente, les grabaron la tarde del jueves mientras trataban ... de llevarse canalones metálicos del tejado. Lo hicieron sin ninguna protección. Es la segunda ocasión que acometen tan delicada maniobra.
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La aparición de una mujer sobre la cubierta de teja volvió a sobresaltar a los residentes legales. «Es su medio de vida, por eso están aquí. Y mientras no haya derribo, seguirán expoliando lo pagado por todos los vitorianos», denunciaron vecinos consultados por EL CORREO. «Venden al peso todo lo que sacan de allí a chatarrerías sin escrúpulos. El beneficio económico es mínimo», ilustraron agentes de la Ertzaintza.
Olárizu lleva ocupado desde 2014 y ayer viernes, el Gobierno Urtaran dio un nuevo paso para su desalojo y posterior demolición. El Ayuntamiento ha otorgado un plazo de una semana para que los moradores ilegales abandonen las viviendas, de titularidad municipal. En caso contrario, el gobierno local se vería obligado a volver a la vía judicial. Patrullas de la Policía Local ya han entregado las primeras citaciones a las 58 personas que se supone viven de manera irregular en ese inmueble ubicado al Suroeste de Vitoria.
Las llamadas ciudadanas de queja por el comportamiento de estos okupas «han sido una constante en los últimos años», reconocen fuentes internas de la Policía Local y de la Ertzaintza. El jueves telefonearon al 092 por la presencia de esa mujer sobre el tejado. «Lo más importante no es lo que roban, sino que pueden matarse», estimaron los vecinos legales.
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Durante los últimos meses, los pisos vacíos de Olárizu han sido «sistemáticamente expoliados», deslizan medios internos de la Guardia urbana. «Lo hemos visto a diario desde nuestras casas», coinciden los residentes legales. El desalojo voluntario de los habitantes ilegales se prevé en una semana, o así lo anunció ayer viernes el Ayuntamiento de Vitoria.
Ayer por la tarde, y a modo de respuesta al movimiento municipal, los okupas desplegaron una pancarta que reza: 'No son desahucios, es una guerra contra los pobres'.
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