Oficinistas de día en Miñano, rockeros de noche

Una iniciativa del Parque Tecnológico de Euskadi que persigue «dar visibilidad al talento creativo de sus trabajadores y transformar el espacio laboralen un ecosistema de vida abierto a experiencias sociales y culturales». Además de los conciertos se podrá disfrutar de sorteos, pintxos y bebidas y obtener descuentos exclusivos para festivales.

«Lo de las etiquetas musicales es complicado». Habla Alain Hernáez, no en su faceta de controlador financiero en una firma de Miñano sino como portavoz de Growing, formación que lidera como guitarrista y vocalista. La trayectoria de este trío que fabrica cortes de rock alternativo con detalles de «indie rock, power pop» se remonta a los 90. Hay que decir que entonces eran cinco componentes influenciados por la pegada del hardcore melódico de aquella época. Varios cambios de 'line up' después llegaron hasta el formato actual de tres instrumentistas que junto a Alain completan Javi (batería) y Pablo (bajo). Con varios trabajos discográficos en su haber y distintas etapas -entre 2000 y 2010 intensificaron su ritmo de bolos y sesiones en el estudio-, en los últimos cursos se lo han tomado con más calma. Dan «un puñado de directos al año». Lo imponen los rigores de la vida profesional. «Me encargo del control financiero en Lantek, que hace software para máquina herramienta», cuenta Hernáez, licenciado en Administración y Dirección de Empresas. En su local de Oreitiasolo suelen ensayar «un día por semana», dice este músico influenciado por Jimmy Eat World, Sunny Day Real Estate, Refused... Hoy brindarán un show «de media hora» con «temas más cañeros». En un bolo corto «suelen funcionar mejor».

No solo se encarga de dar soporte a las áreas de ingeniería, mantenimiento y validación de una empresa en Miñano sino que cuenta un destacado bagaje en bandas de categoría nacional. Manu Fernández, que ahora milita como guitarrista en Echoes&Voices junto a Iván (bases) y Andoni (voz y batería), previamente ha firmado álbumes con Terroristars y Coilbox y tiene conciertos a sus espaldas en citas de entidad como Festimad.

Pero «llega un momento en el que tiras para adelante o tienes que trabajar», dice este instrumentista (bajista de origen) con influencias metal, rock hardcore y también alternativa y electrónica. «Compatibilizo bien el horario de mañana y procuramos ensayar por las tardes o fines de semana», afirma este empleado de Liof Pharma.

Precisamente ahora trabajan en el lanzamiento de un EP, y ya cuentan con un videoclip. Y curiosamente en la cita de Miñano «debutamos» en un concierto al que seguirán otros en Durango, de donde proceden y otros puntos. Los inicios de Echoes&Voices, banda de electrónica, se remontan a antes del covid, con un proyecto de corte «electropostpunk». «Me uní hace un año y medio y le dimos una vuelta a los temas, con un toque más oscuro».

El vitoriano Unai Sarasola comenzó a actuar en solitario «hace 11 años» si bien en su currículum musical figura el grupo Gold Kiss Experience, con el que firmó un disco. Ahora está preparando el lanzamiento de su propio álbum. Con el rock como «pilar central» su sonido incorpora tintes de «blues, un poco de heavy, country». Para el directo de hoy «mi idea es probar canciones nuevas del disco», será «un poco un experimento», avanza este técnico empleado desde hace medio año en la empresa AAC Centro de Acústica. «Hacemos mediciones de ruido: del tráfico, de puestos... se mide y se hacen estudios».

¿De qué tratan sus temas? «Hay un poco de todo, me gusta lo fantástico, el cine friki de terror y ciencia ficción, pero también canciones más introspectivas». Lo de ser 'currela' de día y rockero de noche, coimpaginar los horarios del tajo con los de los conciertos, «es complicado», reconoce Sarasola, formado en Sonido en Andoain y en Audiovisuales en el Instituto Mendizabala de Vitoria. A la hora de subirse al escenario (lo ha hecho en salas como Urban Rock, Jimmy JAzz) algo que el público «no ve» es «todo el trabajo que supone el ensay