Ocho millones para conectar mejor la Montaña y la Llanada Oriental

Según puede adelantar ELCORREO, el Consejo de Gobierno Foral aprobará este martes una inversión de ocho millones de euros para unas obras que arrancarán a mediados del próximo 2022 –ahora se procede a sacar a concurso– y se prevé que se prolonguen durante casi dos años. Esta reforma se ejecutará de forma simultánea al nuevo desdoblamiento de la N-124, la 'autovía' entre el nudo de Armiñón y Zambrana, que se ejecutará a partir de primavera. Empezará una vez que se remate definitivamente la variante de Saratxo, que es la única gran obra que en estos momentos mantiene abierta la Administración foral.

Puede tratarse de una carretera desconocida para muchos foráneos, pero es realmente importante para los locales porque sirve para garantizar las comunicaciones internas en la Montaña Alavesa, facilitar el tránsito hacia Santa Cruz de Campezo y, a partir de ahí, garantizar la conexión con Vitoria a través del puerto de Azazeta. Muchas de sus curvas resultan peligrosas y las deficiencias en la visibilidad en algunos tramos complican la circulación.

La calzada de doble sentido contará con una anchura de seis metros y, además, tendrá unos arcenes de medio metro más en cada uno de sus laterales. Esto garantizará que se pueda circular en coche a una velocidad de entre 50 y 60 kilómetros por hora, según el tramo. Además, los accesos a las localidades de Oteo y Orbiso se adaptarán para garantizar la seguridad de los conductores con carriles de aceleración (cuñas de cambio de velocidad) y de espera en el centro de la vía para poder girar hacia la izquierda.

«Esta intervención va a contribuir también de esta forma a reforzar la cohesión social y territorial de Álava aumentando el atractivo de esta comarca para desarrollar negocios y empresas. Y con ello sumar condiciones para frenar la despoblación», confía la diputada de Infraestructuras Viarias y Movilidad, la socialista Blanca de la Peña.

El proyecto está incluido dentro del Plan Integral de Carreteras (el popularmente conocido como PICA) que también incluye la mejora y la ampliación de la plataforma de la A-4161 entre la intersección con la A-2128 en Entrepeñas y Orbiso, un tramo de algo más de un kilómetro. La obra también implicará la reordenación de los accesos para dotarles de mayor visibilidad y la aplicación de medidas de carácter medioambiental necesarias para conseguir una adecuada integración de la actuación en el entorno.

«Estamos trabajando con el objetivo de reforzar la seguridad vial de las carreteras alavesas destinando más recursos a su conservación y mantenimiento, y ejecutando obras integrales de modernización que, como es el caso de la A-2128, mejoran trazado para suprimir curvas peligrosas y ofrecer más visibilidad», afirma De la Peña sobre un proyecto que saldrá a licitación por 7.820.367 euros –una cantidad que se esperar rebajar con las ofertas que se presenten– y el plazo de ejecución establecido es de 23 meses.

El Departamento foral de Infraestructuras Viarias y Movilidad también ejecutará a lo largo del próximo ejercicio la travesía de Miñano Menor y Moreda de Álava.