El Obispo de Vitoria reivindica la labor de sanitarios e investigadores

La misa del Domingo de Pascua aparece subrayada en el calendario religioso como un encuentro que, además de conmemorar la Resurrección, sirve como agradecimiento a la labor desarrollada por diferentes colectivos a lo largo del año. Desde el mensaje del Papa Francisco en el altar de la Basílica de San Pedro en el Vaticano al de los diferentes obispos en las catedrales, esta homilía tiene un calado especial entre los fieles.

En este año marcado por la pandemia, el Obispo de Vitoria, Juan Carlos Elizalde, ha aludido a la epidemia para lanzar un mensaje de «esperanza», así como para reconocer el gran trabajo que han llevado a cabo colectivos como los sanitarios, voluntarios y profesiones esenciales para evitar mayores estragos.

«No estamos en aquel confinamiento terrible de hace un año, pero sí se atisba esperanza», señaló en la homilía que se desarrolló ayer al mediodía en la Catedral de María Inmaculada con un aforo reducido a diferencia del año pasado cuando se presidieron todas las celebraciones desde la Catedral Nueva por Youtube y Facebook.

El uso de redes sociales, sin embargo, ha venido para quedarse. De hecho, Elizalde grabó un mensaje en vídeo que se puede consultar en el canal de la Diócesis de Vitoria en el que se refirió también al gran trabajo que han llevado a cabo los centros de investigación para desarrollar vacunas, además de la labor de los profesionales que permanecen en primera línea.

«No cesaron de estar cerca de los más vulnerables, hombres y mujeres que dieron lo mejor de ellos mismos», reivindicó Elizalde ante los fieles en la homilía donde se acordó del voluntariado joven que ha trabajado en el «corazón de la pandemia».

La entrega de estos colectivos «hasta la extenuación» abrieron «desde el minuto cero la puerta a la esperanza», afirmó el Obispo de Vitoria en la segunda Semana Santa más atípica que se recuerda.