La nieve y la lluvia mantienen a Álava en alerta con el Zadorra desbocado

La desapacible jornada de este miércoles, a excepción de la tregua que ha durado hasta el mediodía, se ha convertido en desconcierto al anochecer con la segunda nevada del otoño, que ha derivado en afecciones al tráfico, con quitanieves en la AP-68 para mantenerla operativa (no evitaron retenciones de más de 30 minutos) y varios puertos cerrados. El Ayuntamiento y la Diputación mantienen para este jueves el nivel de emergencia. Es decir, con las palas, tractores con cuchilla y operarios listos para intervenir. En cualquier caso, lo más probable es que el agua vuelva a adueñarse del asfalto y las aceras desde primera hora de la mañana. La alerta, sin embargo, deberá dar respuesta al arranque de la actividad tras el puente festivo, sobre todo en los accesos del polígono de Júndiz.

También tendrán que reactivarse a primera hora algunos servicios que este miércoles han quedado suspendidos por la nieve. Se trata, por ejemplo, de los viajes de las líneas 14, 15 y 16 de Alavabus, al igual que la 7, entre Vitoria y Lagrán. La Unión también ha optado por suspender los servicios de forma temporal para evitar cualquier accidente. Todas estas conexiones, sin embargo, volverán a ponerse en funcionamiento a lo largo del día.

La borrasca Barra no dará tregua hasta el filo del fin de semana. Es decir, el número de días de lluvia ininterrumpida superará la veintena si se cumplen los pronósticos. «Son muchos días seguidos lloviendo. Pocas veces hemos tenido tanta precipitación en tan poco tiempo», reconocía ayer el responsable de Euskalmet, José Antonio Aranda. La Agencia Estatal de Meteorología, lo confirmaba al subrayar que las últimas lluvias ya han multiplicado «por tres» la media de estas fechas. De hecho, Aemet concretó que, tanto en Euskadi como en el norte de Navarra se han acumulado en diez días más de 300 litros por metro cuadrado. Destaca en este balance la medición realizada en el santuario de Urkiola.

Y mientras no escampe, el desembalse continuará en Ullibarri-Gamboa. El pantano ha pasado de tener cinco compuertas abiertas a siete. Y lo ha hecho en cuanto han caído las primeras gotas del día, señal de que el vaciado continuará al menos otra jornada. Eso sí, las previsiones apuntan a que las temperaturas darán al fin un pequeño respiro. El mercurio escalará este jueves hasta los ocho grados y se espera que rebase los dobles dígitos a partir del viernes. La lluvia, sin embargo, no abandonará el territorio hasta el domingo.

El riesgo en las provincias vecinas hay que buscarlo frente al mar. Olas de más de cinco metros de altura han llenado durante la jornada del miércoles algunas playas vizcaínas de troncos y todo tipo de residuos. Y a la costa también volverán las fuertes lluvias, tras una tregua relativa en el último día de estas minivacaciones.

8°de máxima. Mínima 2 º

11°de máxima. Mínima 6 º

11°de máxima. Mínima 7 º

13°de máxima. Mínima 4 º

Ante esta situación, el Gobierno vasco ha activado la mesa de crisis del plan especial de emergencias por riesgo de inundaciones por segunda vez sólo en diez días. También permanecerá el aviso amarillo por riesgo marítimo-costero para la navegación. El viento de componente oeste, fuerza 5-6, con intervalos de 7 durante la segunda mitad del día, originará fuerte marejada a mar gruesa. El Ayuntamiento de Bilbao recomendó ayer a la ciudadanía evitar largos viajes por carreteras estos días y no aparcar en zonas que se inunden con facilidad.