Navarra pide al Estado la declaración de zona de desastre natural

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska visitó ayer tarde las zonas afectadas y aseguró que el Gobierno trabaja ya en la «fase de recuperación». Chivite ha convocado para esta tarde una reunión virtual con los ayuntamientos de 74 municipios que han registrado daños a causa de los desbordamientos, que en esa comunidad se han cobrado la vida de dos personas en las localidades de Sunbilla y Elizondo.

En este último pueblo lloraban ayer la muerte de su vecino Juan Antonio Etxegarai. «Estamos consternados, se lo ha tragado el Bidasoa, es una desgracia», lamentaba el alcalde, Aitor Bazterrika. «Esto es muy pequeño y nos conocemos todos. Estaba soltero y era una persona muy querida», añadió.

El cuerpo sin vida del hombre, de 61 años, desaparecido el viernes, fue rescatado a la mañana siguiente del cauce del río. Fue necesaria la utilización de una grúa de gran tonelaje porque el vehículo, con el cuerpo del vecino de Elizondo en su interior, se encontraba sumergido a 32 metros de la carretera y a unos 100 metros del cruce de la vía que lleva a Lesaka.

El riesgo de inundaciones se ha trasladado ahora a Aragón, la siguiente etapa de toda la cuenca del Ebro después de Euskadi y Navarra. La extraordinaria crecida del río en las últimas horas -por las aguas que ya trae desde su zona alta- ha puesto en alerta a esta comunidad, donde se espera que los valores más altos del caudal lleguen a Zaragoza capital durante la tarde de mañana y primeras horas del miércoles.

En la localidad de Novillas (en la provincia de Zaragoza), el agua alcanzó ayer una altura superior a de la riada de 2015. Por este motivo se decidió desalojar a un centenar de vecinos de las viviendas de la parte baja del pueblo hacia la zona alta.