La llamada 'Nasa española', que tantos ríos de tinta ha hecho correr, se instalará definitivamente en Sevilla. La verdad es que Vitoria nunca fue una candidata seria. Quien debía defender sus opciones, sea el Gobierno vasco, nunca creyó en las capacidades de la capital de ... Aernnova o Foronda, por ejemplo. Siempre pensó, y sus razones tendrá la consejera Arantxa Tapia, que Zamudio y Bizkaia estaban mejor posicionadas. Es una pena. No solo por la pérdida de oportunidades para nuestra ciudad, sino por las posibilidades que Vitoria tiene en el campo de la ingeniería. Y a los hechos me remito.
Publicidad
Vitoria es la ciudad donde el equipo de Gobierno de la ciudad, con un Google Maps y un rotulador, ofrece no una sino hasta cuatro alternativas al trazado que los técnicos de ETS (Eusko Trenbide Sarea) han propuesto para el tranvía a Zabalgana. Qué sabrán los profesionales encargados de la red de ferrocarril de poner vías. Un equipo municipal es quien conoce al dedillo las características de la ciudad, sus curvas, inclinaciones, el terreno y el terruño.
Vitoria es la ciudad donde una asociación de vecinos, en este caso de San Martín, piden que el tranvía vaya por la calle Bustinzuri porque es una calle muy amplia y con menos portales. Como si la eficacia del transporte público no fuese directamente proporcional a su cercanía con el mayor número de portales y, por ende, de vecinos. Prometen los habitantes del barrio, o al menos la asociación, una amplía contestación social si el trazado del metro ligero va por donde dicen los osados técnicos.
Algo sabe también ETS de la contestación vecinal. Es en Vitoria donde los vecinos de Abetxuko se opusieron con todas sus fuerzas a que los convoyes de Euskotran entrasen en el barrio. Hasta que el tren se quedó a las puertas del mismo y exigieron, con las mismas fuerzas, que llegase al centro mismo del arrabal.
Publicidad
En San Cristóbal fueron también los vecinos los que llenaron sus balcones de telas con el lema 'Tranvía, no'. Ahora llenan los vagones con destino al centro de la ciudad.
Bienvenida sea, por supuesto, la participación ciudadana. Pero es llamativo que en esta ciudad casi siempre se utilice para frenar y retrasar proyectos. Es raro escuchar una apuesta decidida por arriesgar, por innovar, por plantear nuevos proyectos.
Hace muchos años oí en una rueda de prensa, precisamente en el Ayuntamiento, que un concejal con un lápiz no es un ingeniero, sino un concejal con un lápiz. Cuánta verdad en aquellas palabras fruto de la enésima refriega que en la 'capital del no' vivimos por vaya a usted a saber qué. Obviamente, en aquella batalla también ganó el pesimismo, la oposición al cambio y la negación al progreso.
Publicidad
Qué oportunidad ha perdido la 'Nasa española' de instalarse en la ciudad de los ingenieros. Aunque si hubiese venido, alguna pega le habríamos sacado.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.